
domingo, 14 de agosto de 2011
EL INTERNADO... SHE WILL BE LOVED
El frio mental de la pistola atravezaba los guantes de piel negros que tenia. Era hora. No habia lugar para remordimientos o arrepentimientos. Este no era un mundo para los debiles o maricas. Este era mi mundo.
…
Me encontraba caminado de un lado al otro de mi habitación. El corazon me latia y sentia una pesades en el pecho. Hace unas horas habia escuchado a matt y Dorian hablando sobre mattar a alguien de Colombia…me daba temor de bo de reconocer, no sabia como sacarme esto de la cabeza y mi maldita conciencia de puritana me decia que debia llamar a la policia, pero en el fondo sabia que de hacerlo Dorian estaria en la carcel. Eso solo me acarrearia problemas, porque se que el sexo con el es infinitamente bueno, que me respeta por el simple hecho de hacerle feliz en la cama…pero dudo mucho que estando en la carcel el se tiente el corazon y me deje andar como si nada por la vida. Se que me mandaria a matar! … a menos que respete mi vida si prometo ir a darle unas cuantas visitas conyugales…mirenme! Hablando y pensando como puta. Que vergüenza, me desconozco.
De pronto de escucha la puerta, por instinto miro el reloj, son 3 de la mañana y estoy segura que es el. Sus padres no volvierona casa después de la ceremonia de esta mañana.
Se escuchan ruidos en la parte baja, se hacen mas fuertes y puedo percibir que esta en el bar…el sonido de las copas y de botellas se hacen mas claros en cuanto pego el oido a la puerta. ¿ya los habra matado?, ¿estara herido?...y si esta herido, puede morir…no,no,no…eso no, porque de estar herido iria a un hospital…pero que diria?: es que mate a unos cuantos hombre y ellos me hirieron defendendose de mi …eres una idiota tn!
Suben las escaleras, pero no solo son dos pies…son mas…¿Qué como lo se?, bueno es que cuando vives en un internado vigilada las 24 horas por gente caminando en los pasillos, entonces aprendes a diferenciar si son pisadas de una o mas personas.
Tocan mi puerta. Doy un bote del susto, para después saltar dentro de la cama y cubrirme con la sabanas, todo a impresionante velocidad. No cabe duda que la adrenalina te hace como la mujer maravilla. No hago ruido. Intento calmar mis respiraciones y mi corazon que queria salir volando de mi pecho por mi boca.
Se alejan los pasos y yo me tranquilizo a medias.
-mierda! Tranquilo matt…espera
Escucho tocar de nuevo mi puerta pero con mas despesperacion.
-tn…cariño estas despierta?
-sss..si –balbuseo aun en mi cama-
Abre la puerta y enciende la luz.
-gracias al cielo…podrias venir un instante?
-que pasa?
-es urgente, no preguntes bonita
Me paro de la cama y camino hacia el.
-que diablos! –me asombro al ver sus manos llenas de sangre- estas bien, ¿te hirieron?
-mueve su cabeza de forma negativa- es matt
-vamos
Salgo de la habitación y en la mitad del pasillo estaba recargado en el muro. Su mano presionaba una parte de si muslo y la otra tenia un vaso con wisky. Me acerque a toda velocidad y pude notar como estaba palido. Habia un poco de sangre en el piso y su mano perdia mas fuerza a cada segundo. De pronto callo al suelo el wisky. Me asuste un poco.
-mirame matty –le sonrio y el lo hace de nuevo-
-creo que mori y estoy en el cielo…eres mi angel?
-aun no mueres, pero sera mejor que hagamos algo ahora
-gracias querida
-ayudame a levantarlo, y llevalo a mi cama –le digo a Dorian que solo me miraba.
De inmediato me ayudo a levantarle y nos dirijimos a mi habitación. Estaba dejando su rastro de sangre en el trayecto y eso no me gustaba nada. Podria ser una emorragia y asi estariamos perdidos.
-cuentame de ti matt –le dije en cuanto se encontraba acostaso sobre la cama. presione con mi mano la sona afectada- anda, un chico guapo como tu debe tener grandes anecdotas
-el parecia no estar aquí…respiraba costosamente-yo…yo…
-aquí esta! –se nota agitado. Me entrega las cosas que le encargue antes de que saliera corriendo-
-vaya, aquí tambien tienes oculto un hospital? –pregunto vendo como me surtio lo que pedi con facilidad-
-no hagas preguntas y salvalo
Esa fue una suplica. Vi en su rostro pavor de perder a su amigo…o complice.
…
Las manos de tn estaban cobierts de sangre. Matt se encontraba en su cama descansando y recuperandose. Ella es un angel, se lo dijo matt antes de desmayarse, pero fue de dolor al sacar la bala de su muslo. Es que no teniamos anestesicos.
-gracias –le digo mientras se lavaba con mucha fuerza las manos-
-no hay de que –me mira atravez del espejo que esta justo arriba de su lavamanos- sabes que fue peligroso verdad?
-asiento con la cabeza-
-no lo volveras a hacer, cierto?
-no lo se, y mejor no hablemos de esto
-tu amigo estuvo a punto de morir –se exalta- eso no es suficiente
-no depende de mi, son las situaciones tn…
-situaciones, situaciones…ire a la sala, dormire alli –se seca las manos-
-te ofresco mi habitación
-no gracias, no me sentiria bien en este momento acostarme cntigo…ademas, matt te necesitara esta semana y no creo qe puedas acompañarme a alemania
-¿Cuándo te iras?
-pasado mañana
-no te preocupes, le contrato una enfermera y listo
-no, prefiero ir sola-su mirada era de desepcion-
-donde te quedaras?
-con tom y bill, estare bien no te preocupes
-esta bien, no ire contigo…pero nos veremos alla, se te olvida que mis padres estan invitados y yo tambien?
-pone sus ojos en blanco- como quieras.
Cada vez me convenso mas que ya no la pongo nerviosa como antes, ya no la sonrojo cada que le digo un piropo lindo o cuando le toco la pierna de forma “inocente”, ya no causo efecto…y lo que mas me castra reconocer es que cada que menciono a moritz, algo se enciende en ella de forma automatica, como si el pronunciar su nombre la estremeciera.
El maldito seguia acumulando puntos y sin siquiera saberlo.
…
-hola lindo –sonrie tn tras el telefono-
-tn!!!!! –no aguanto la emocion y digo con efusividad su nombre. Después sonrio sonrojado porque todos en la estancia me habian escuchado-
-vaya, me da gusto saber que aun me recuerdas
-en tan solo 5 dias robaste mi corazon linda, como habria de olvidarte
-tu y tus juegos, algun dia me creere que me amas e ire a pedirte matrimonio –bromea-
-cuando quieras, yo dire “acepto” –rio-
-me da gusto volver a oirte tom
-y a mi, pero dejemonos de juegos y dime a que debo el honor de tu llamada
A estas alturas ya tenia la mirada de todos en mi. Eso incluia a gustav, bill, Andreas y georg…x cierto estabamos en la despedida de soltero de este ultimo.
-solo queria ver si era posible que me recogieras en el aeropuerto mañana
-me quedo callado pensando en que si me ponia ebrio el dia de hoy seguro mañana ni el dios de la resaca seria piadoso cnmigo y me dejaria levantar- claro, dime a que hora llega tu vuelo
-sera por la tarde, supuse que estarias con algo de resaca
-parece que me conoces mejor que mi madre –le sonrio-
-entonces, que dices
-que si…oye –recuerdo que ella vendria acompañada- que no vendrias con tu novio?
-cambio de planes
-perfecto, eso quiere decir que iremos juntos
-iremos juntos –escucho sonreir detrás del telefono-
-entonces mañana por la tarde nos veremos
-esta bien, entonces nos veremos a las 4 pm, no tardes mucho
-en punto estare alli linda. Cuidate hasta entonces que después yo te cuidare aquí
-jajaja, no puede ser tom kaulitz, con ese don y aun no tienes novia?
-bueno, se hace lo que puede pero la chica que quiero vive en Inglaterra con el peor enemigo de mi mejor amigo, asi que imagina la brutal situación en la que estoy
Me siento algo tonto al estar colgado en el telefono con ella mientras una nudista esta haciendo lo suyo en la mesa. Todos observaban aquello con los ojos abiertos, inluso bill que pense que era gay jajaja…solo georg parece estar mas atento a mi charla.
-quien sabe y un dia esa chica se atreva a darte el si…o quiza no quiera compromisos y disfrute de divertirse solamente
-sonrio con malisia- en verdad?...solo diversión sin compromiso
-exacto, para que involucrate en cosas que no necesitas, si o unico que quieres es placer…asi creo que no estarias en esa encrusijada de el enemigo de tu amigo y demas tonterias
Su voz era profunda y sexy. Temi que no estuviese hablando con la tierna niña de cabellos ondulados y mirada limpia que hace meses dejamos ir. Pero esto me gustaba aun mas que la anterior tn.
-me encanta como piensas linda
-nos vemos entonces vale tom?
-vale linda, mientras ire a divertirme en la despedida de soltero
-ok, me saludas a todos x alla
Colgue y de inmediato volvi la vista hacia la nudista, que ahora estaba frente a nosotros casi completamente desnuda. Regrese al asiento al lado de georg.
-si no la quieres esta noche tu, entonces sere yo quien viva tu despedida en grande
-bebe toda su cerveza de un sorbo- no me interesa, puedes follartela si quieres
-sonrio- esta bien…mmm…tn llamo, vendra mañana por la tarde, a las 4 llega su vuelo
-¿Por qué me dices eso?
-porque le prometi estar alli, pero para serte sincero dudo mucho que pueda desocuparme a esa hora,digo, ahora que ya me diste permiso de follarme a tu nudista
La mirada de georg era diferente, su semblante habia cambiado y una sonrisa se le formo en sus labios. Esta ultima semana habia estado tenso y triste. Yo lo estaria de saber que me casaria, so importa que sea la top model mas sexy del planeta.
-esta bien, ire por ella
-gracias amigo, te debo una
Siempre supe muy en el fondo que esos dos se traian mas que una amistad, mas que una hermandad. Ellos se pasaban de fraternales. Y aun que nunca dije nada no por eso deje de sospechar.
…
-buen dia tn
Escucho a matt despertarme por la mañana. Me sobresalto por verlo de pie tan pronto.
-creo que quedo claro cuando te dije que no podias levantarte hasta 5 dias después –me froto los ojos mientras despierto por completo-
-tengo derecho a darte las gracias e irte a despedir al aeropuerto –sonrie con picardia-
-supongo que no me puedo negar a tu gratitud, pero no puedes venir al aeropuerto
-tonterias, estoy bien…de verdad, no es tan grave
-aun cojeas matt, esto fue cerio
-pero tuve mucha suerte de tener una hermosa enfermera –besa mi mejilla tomandome por sorpresa- me dijo Dorian que cuidaste la noche pasada de mi
-no fue nada –insisto-
-salvaste mi vida y te juro que cuidare la tuya a costa de quien sea, incluso de el
-¿de el?
En ese momento aparecio Dorian. Vestido con su ropa de golf. Me miro y sonrio.
-el avion te dejara si no te apresuras –mira después a su amigo- tu regresa a la cama, no entiendes lo que son vacaciones por incapacidad!
-los regaños de tn fueron suficientes y los tolero, pero los tuyos no…de no ser por mi pierna que se interpuso en el camino de la vala, ahora estariamos cafeteandote
-no seas dramatico quieres, yo tenia la situación bajo control! –exagera su tono de voz-
-¿bajo control?...claro!, solo si querias ver tu cabeza perforada
-estaba en el suelo! –se defiende Dorian-
-y que se supone que hacias alli ah?, yo soy quien cuida tu trasero!
-no puede ser –bufe-sera mejor ducharme –miro a Dorian- clara regreso de vacaciones?
-si linda, temprano…¿quieres algo?
-solo que prepare mis maletas
-de acuerdo
3 horas después
-si necesitas algo solo llamame, no importa la hora –dice Dorian sujetando mi cintura como si de verdad le doliera separarse de mi-
-gracias, aunque nos veremos mañana
-si, pero uno nunca sabe…quiza quieras un poco de sexo telefonico
-ja!, creo que sera al revez
-dalo por hecho, te extrañare esta noche en mi cama
-yo no prometo lo mismo –me separo de el-hasta mañana
-nos vemos –agita su mano despidiendose-
Tarde veinte minutos en revision y todos esos tramites que ahora se hacen en los aeropuertos para evitar atentados. Odio a los malditos delincuentes! Solo por ellos pagamos los buenos ciudadanos. Rei un poco ante mis pensamientos de anciana y aborde el avion. Fueron algunas horas de vuelo, pero llegue sana y salva a alemania…mi primera vez en este pais.
Miro a mis alrededores, pero no logro percibir una gran modificacion en el ambiente, sigue siendo una eropuerto después de todo. Respiro aun asi el aroma y pude identificar café…me dio algo de hambre a pesar de haber bebido ya un poco de jugo durante en vuelo en primera clase. Pero algo me detuvo a ir tras el café.
-¿Qué tal el viaje? –dijo justo detrás de mi nuca haciendo temblar hasta el rincon mas escondido de mi anatomia…aun podia hacer esas cosas pasar-
-bien
Intento parecer segura. Disimulo muy bien que mis piernas estan firmes y que en este momento no siento mi trasero congelado al igual que mis manos. Me doy la vuelta como si fuese un robot controlado por alguien mas que no soy yo.
-gracias –lo digo viendole el rostro-
-me sonrie- que gusto volver a verte
Georg listing me abrazo en cuanto termino esa frase. Yo me quede sin hacer movimiento. No queria su abrazo ahora, quiza después de que mate a tom, pero ahora no quiero contacto fisico con el.
-se separa de mi- se que hace meses terminamos mal pero…-le interrumpo-
-y tom? –tomo el mango de mi maleta de ruedas con fuerza. Lista para huir si me descubria sintiendo amor por georg-
-esta indispuesto, no pudo ponerse de pie…aunque me dijo que rogaba tu perdon
-claro, asi de facil…bueno, entonces t me llevaras a su casa
-asiente dejando caer un mechon de su larga cabellera hacia delante- si
-bueno, si no hay de otra, entonces vámonos –comienzo a caminar adivinando la salida, el me sigue y toma la maleta-
Pude persivir como estaba rodeado por dos agentes de seguridad privada. No los note antes por estupida distraida. Aun esos ojos verdes me vuelven idiota.
-aun te acosan tus fanaticas?
-un poco, esto es por imposición de la discografica
-me parece bien, asi le hacen un favor a tu esposa
Frente a mi una van negra enorme y detrás habia otra mas. Georg me ayudo a subir a la primera y en cuanto el tipo de sguridad cerro la puerta corrio a subirse a la de atrás. Creo que donde sea que vaya me encontrare con tipos corpulentos y con cara de pocos amigos.
- y como te ha ido? –hace una pregunta al aire. Pero sin duda estaba dirijida a mi, estoy completamente segura que le vale un cacahuate la vida de su chofer-
-muy bien –intento fingir una sonrisa- de maravilla
-aquí las cosas no van tan bien –roza mi mano que estaba sobre el asiento- te extrañamos mucho
-ya estoy aquí –digo sin pensar…imbesil!, idiota!, mejor calma tus emociones-
-y no sabes cuanto gusto me da saberlo –cubre mi mano con la suya completamente calida-
-yo solo dirijo la mirada hacia otro lado que no sean sus ojos-
-aceptaron tu solicitud a la universidad?
-n…si, la aceptaron
-eso quiere decir que viviras hasta que termines tu carrera alla
-si georg -safo mi mano- ahora tengo una verdadera razon par quedarme de por vida en Inglaterra
-seguiras viviendo con Barnes –quize pensar que pregunto, pero mas bien sono a una afirmación-
-me limito a encogerme de hombros. Vaya que no le diria mis verdaderos planes.-no se lo que pasara en unas horas, en dias o en meses…solo vivo este instante
-mirame
Su voz se volvio profunda, calida…cerre mis ojos y movi mi cabeza de forma negativa. No necesitaba verlo ahora que estoy sintiendo fuego que consume mis intestinos.
-mirame por favor –para ese entonces ya tenia su manos sobre mi barbilla y hacia girar mi cabeza de forma delicada-
-sabia que mi cabeza no giraria mas. Entonces imagine que ya staba frente a frente…pero no estaba lista para esto. Asi que cerre los ojos mas fuerte.
Respire profundamente. Un aire tibio hizo cosquillas a mis labios. Escuche su respiración entrecortada cerca mio, pero aun asi me negue a verlo. Solo pude limitarme a sentir sus labios estamparse en los mios.
Estaba volviendo a sentirlo. Probarlo. Saborearlo. Su boca no era como las demas. Sus labios no se sentian como los de Dorian. El hacia que miles de fuegos artificiales se encendieran en mi pecho y murieran en mi vientre.
Queria mas de el. Queria todo de el. Queria volverme a sentir parte de el.
sábado, 13 de agosto de 2011
─═☆ Vecinos┊Adaptación ☆═─ » Capitulo 3
═─ » Capítulo 3
Tom, Lord de Kaulitz, sentado en la cabecera de su mesa miró boquiabierto al hombre delante de él. Hethe acababa de volver para varias semanas de batalla, luchando en nombre de su rey. Era algo lo que más estaba haciendo últimamente.
Realmente, era casi todo lo que había hecho desde la muerte de su esposa diez años atrás. Incluso antes que Gustav II mostrase su ambición constante de extender su poder, y Tom había utilizado la ambición del soberano para tener una excusa para no estar en la casa que compartía, primero con sus padres hiper críticos, y luego con Nerissa su joven esposa.
Se frotó el cansancio de sus ojos, deseando que pudiese borrar los recuerdos tan fácilmente. Los pensamientos sobre su pobre esposa muerta siempre lo hacían sentirse arrepentido. Ellos habían sido muy jóvenes. Ella aun mas joven.
Huyendo de los pensamientos como siempre hacía, Tom frunció el ceño ante Lord Georg.
“Explíqueme su presencia aquí nuevamente, por favor, mi lord”, él ordenó cautelosamente.
“El rey me mandó con este mensaje”, El hombre sacó el pergamino. “Y me ordenó pasar a buscarlo y llevarlo a Tiernay para que se case con Lady ______.”
“No puedes casarte con esa bruja!” Bill exclamó mientras Tom reticentemente tomaba el pergamino ofrecido y rompía su sello.
“Lady Tiernay no es una bruja,” Georg dijo con una mirada de reprobación al hombre de confianza de Tom — quien, por encima de todo, debería cuidar mejor de los intereses de su lord. “Acabo de venir de allá, y ella es bastante agradable.”
“Oh, sí. Bien… qué otra cosa diría usted, verdad? ” Bill murmuró.
“Ya vio a la dama en cuestión?” Georg preguntó irritadamente, luego sonrió con satisfacción cuando el hombre reticentemente sacudió la cabeza. “Bien, yo si, y ella es muy bonita. Muy”. Su voz se perdió entonces, y él agregó casi entre dientes, "Aunque su tía es un poco... especial”.
“Qué pasa con su tía?” Tom preguntó abruptamente, dándole la misiva del rey para que Bill pudiera leerla. El solamente estaba interesado en la firma, y la reconoció inmediatamente como la del rey. El había recibido suficientes misivas del hombre como para reconocer la escritura Gustav. La firma era suficiente para asegurarle que las reivindicaciones de Georg probablemente eran verdaderas. No era que realmente dudase de eso. Por qué el hombre mentiría sobre algo como esto?
La expresión de Georg prontamente se hizo irritada ante la pregunta, pero él simplemente sacudió la cabeza y preguntó, “Bien, qué me dice? Se casará con la dama o no?”
“Tengo otra alternativa?” Tom preguntó con una carcajada, pero él miró a Bill en vez de a Georg, buscando una respuesta. Su hombre levantó la vista del pergamino que estaba leyendo y sacudió la cabeza con disgusto.
“No creo”. Tom se pasó una mano por el cabello. La última cosa con la cual necesitaba lidiar ahora mismo era otra esposa. Aunque él había estado buscando una, la Tirana de Tiernay era la última que habría escogido.
Santo Dios! La mujer era una entrometida abominable, siempre enviando mensajes o reprobándolo por el modo en que él lidiaba con su gente. Por lo menos, eso era lo que había escuchado. El nunca había leído los mensajes personalmente, pero Bill le reportaba las novedades sobre ese asunto. Bill recibía las noticias de Stephen, su segundo hombre en comando, cuando Tom estaba lejos de la fortaleza. El joven Stephen era terriblemente hostilizado por esa mujer.
Ahora parecía que él mismo sería hostilizado —y no a través de mensajes impersonales.
Tendría que lidiar con la mujer personalmente. Demasiado personalmente, en realidad. Ese pensamiento fue suficiente para hacerlo saltar de la silla e ir rápidamente en dirección a las escaleras. Georg inmediatamente se puso de pie y lo siguió.
“Mi lord? Qué está haciendo?”
“Voy a tomar un baño”, Tom anunció sin diminuir la velocidad de sus pasos. “Espero tener permiso para tomar un baño para quitarme el hedor y disfrutar del resto de la noche antes que deba casarme con la muchacha? No creo que ella se vaya a escapar”.
“Oh. No”. Georg se detuvo al pie de las escaleras y permitió que Lord Kaulitz continuase solo. “Quiero decir, si — un baño y descanso serán buenos. Enviaré un mensajero para avisarle a Lady Tiernay que estaremos yendo mañana. Después de un desayuno rápido, le parece?” él agregó esperanzadamente.
“Después del almuerzo”, Tom lo corrigió. “Quiero escuchar como van las cosas en mis tierras antes que salir corriendo a otra propiedad.”
“Si. Después del almuerzo”, Georg concordó reticentemente.
Gruñendo en respuesta, Tom continuó escaleras arriba y hacia su cuarto.
Estaba de pie mirando la vista por la ventana varios minutos más tarde cuando se oyó un golpe en la puerta. Gritándole a quien fuese que entrase, no se quedó del todo sorprendido al ver que la puerta era abierta para revelar varios criados cargando una tina y numerosos baldes con agua calientes. El no había ordenado el baño, pero había mencionado su deseo de tomar un baño a Georg. Eso era suficiente que la acción se ejecutase. Los criados de Kaulitz estaban bien entrenados y eran rápidos para cumplir sus deberes. Eso era bueno; sus hombres habían escogido y entrenado a esos criados muy bien.
Tom observó en silencio como su baño era preparado; luego despachó a los criados.
Una de las criadas se quedó, preparada para ayudarlo con el baño, y aunque tenía pechos grandes y era bonita, él le indicó que se fuera también. Deseaba estar solo. Tenía que considerar ese asunto del casamiento. Estar casado nuevamente. Tener otra esposa de quien él sería responsable.
Sintiendo sus músculos tensarse ante la mera idea, rápidamente se quitó la ropas y entró en la tina. El agua se cerró a su alrededor como una amante tierna e invitante, se inclinó y cerró los ojos mientras sentía su cuerpo relajarse lentamente y su mente, vagar.
Había tenido unos meros doce años y Nerissa siete cuando su casamiento había sido arreglado. El tenía diecisiete y ella no mucho más que doce cuando sus padres se cansaron de esperar y decidieron realizar la ceremonia. Ambas partes habían estado ansioso por unir las familias — Kaulitz ofreciendo su apellido, su riqueza y su título y Nerissa los de su padre. Aunque joven como era en ese entonces, había sido suficientemente maduro como para sugerir — bastante enfáticamente — que demorasen el casamiento hasta que la niña fuese mayor. Pero ninguna de las dos partes quiso eso.
Desgraciadamente, Nerissa había sido la persona que había pagado el precio por las ambiciones de sus padres'. Había quedado embarazada inmediatamente, y luego había sido sacrificada en la cama de parto. Ella no había llegado a cumplir catorce años.
Tom nunca se perdonaría por haber fallado en persuadir a su padre para esperar. O tal vez podría haberse rehusado a consumar el matrimonio. Podría haber permitido que todos ellos pensasen que estaba consumado, y luego secretamente esperar hasta que ella tuviese un año o dos más. Pero no lo había hecho. En realidad, no había sido un muchacho tan maduro y ella había sido una niña adorable. Una buena dosis de alcohol y la firme instrucción de su padre habían asegurado que la acción fuese consumada. Nueve meses más tarde la había escuchado gritar como su hijo luchaba por llegar al mundo.
La criatura falleció, y Nerissa se desangró hasta la muerte con su bebé inerte aún dentro de ella.
Y luego Tom había luchado contra sus propios demonios y los enemigos del rey desde entonces. Semanas pasadas en campos de batallas se convirtieron en meses. Luchaba hasta cansarse del hedor y la imagen de la muerte, luego volvía a su casa, siempre esperando que esa vez realmente pudiese descansar. Que esa vez, su casa fuese el refugio que buscaba. Pero nunca hallaba ese refugio. Para él, los gritos de Nerissa todavía hacían eco en los corredores del castillo. Rápidamente, a veces en una cuestión de horas, se sentía ansioso por salir nuevamente. No podía hallar paz.
Ese día no era diferente, él pensó. Aunque esa vez no eran los gritos de Nerissa lo que hacían desear huir de las frías paredes de piedra de Kaulitz. No. Esa vez, la cosa que lo haría salir corriendo de vuelta a los campos de batalla era el mensaje que el hombre del rey acababa de entregarle. Casarse nuevamente— y con la tirana de Tiernay.
Era irónico, realmente. Esa vez él sería el sacrificado, y por el capricho del rey. No podía decir que era divertido.
Un golpe en la puerta lo sacó de sus pensamientos desagradables y Tom se sentó en la tina, diciendo “entre” mientas comenzaba a lavarse. El no se sintió muy sorprendido cuando Bill entró. A esa altura su hombre habría recibido el reporte de Stephen, y él le pasaría las noticias. Era la rutina habitual.
“Qué noticias hay?” Tom preguntó, mientras se lavaba la cabeza.
“Nada realmente. Por lo menos, nada que no hayamos escuchado en las misivas anteriores”.
Bill encogió los hombros, luego se sentó en el borde de la cama para contemplar a Tom.
“Realmente no te vas a casar con ella, verdad?”
Tom se quedó callado por un momento, luego preguntó, “La carta te sonó como un pedido o como una orden?”
“Una orden”, el hombre admitió reticentemente.
Tom hizo una mueca, luego encogió los hombros. “Supongo que tengo que hacerlo. Tenía que casarme nuevamente algún día”, él agregó, intentando aceptar la solución al asunto.
“Si, pero… con la tirana de Tiernay…” Bill parecía afligido, y Tom se rió ante su expresión.
“Si, bien. Me casaré con ella, me acostaré con ella; luego veremos si el rey necesita nuestros servicios para somete a ese hijo rebelde que tiene. Si dejamos a mi esposa en Tiernay y le hago visitas infrecuentes, las cosas no deberían cambiar tanto”.
El alivio de Bill era palpable, y Tom lo entendió. Bill había sido un niño flaco y menudo, frecuentemente burlado por los otros. Pero al final de su adolescencia, había tenido un crecimiento extraordinario que lo había convertido en el hombre alto y fuerte que ahora era. Eso, más su entrenamiento al lado de Tom, lo habían hecho en un caballero muy calificado. Tom sabía que su amigo esperaba ganar más gloria, la atención del rey, y tal vez que le concediesen tierras, por los servicios prestados con su espada. Esa era la razón por la cual Bill nunca había vacilado en participar en batallas con él, incluso alentaba a Tom a presentar voluntariamente sus servicios y sus hombres a Gustav. Tom, de repente enredado con una esposa y evitando ir a la guerra, podía estropear sus ambiciones. Pero Bill no debería tener miedo; Tom no deseaba asentarse.
“Acostarte con la tirana de Tiernay”, Bill dijo con un temblor fingido. “Ugh. Tienes mis sinceras condolencias”.
“Aprecio esas condolencias, Bill. Verdaderamente”. Él habló secamente, pero su mente se sintió tentada de recordar la imagen de la mujer. Ella había sido una niña cuando la había visto por última vez, una niña de tal vez diez años. Había ido a Tiernay después de la muerte de su padre para discutir y asegurar la continuación de los tratados entre Kaulitz y Tiernay con el padre de esa niña. Había sido el año de la muerte de Nerissa. Si, ella habría tenido más o menos diez años —sólo dos años menos que su propia novia cuando se había casado con ella. Pero la hija de Tiernay no mostraba en ese momento ninguna de las curvas o de la belleza de su Nerissa. Recordaba a una niña muy delgada y menuda. Probablemente no hubiese mejorado con el paso del tiempo. _____ de Tiernay probablemente fuese un palo de escoba con ropas.
viernes, 12 de agosto de 2011
─═☆ Vecinos┊Adaptación ☆═─ » Capitulo 2
Bueno aqui esta el segundo capitulo, esta ves les subiré algunas imágenes de los personajes =). Claro las imágenes de ti solo son por los vestidos y tu cabello =) así que cambiare de artista.
═─ »Capitulo 2
“No puede ser!” te sentiste mareada y asqueada. Sintiéndote temblar, sacudiste la cabeza determinadamente y escrutaste la cara de Georg. “Seguramente esto es una broma?”
Estabas tan enojada que ni notaste que estabas agitando el pergamino mientras mirabas a Lord Georg. Ni tampoco notaste la súbita preocupación en la cara del hombre mientras él lentamente sacudía la cabeza. “No, mi lady. El rey no hace bromas.”
“Pero debe ser... El no puede... Esto es... ” tropezabas con tus palabras cuando se oyó el sonido de pasos acercándose. Te diste vuelta, aliviada de ver a tu tía entrando en el recinto. La tía Nell siempre era la voz de la razón. Ella sabría qué hacer con esa… situación.
“Tia Nell!” hasta tu te quedaste sorprendida con el tono desesperado de tu voz mientras te levantabas de la silla y te apresuraba a saludar a tu tía que había sido como una madre para ti desde la muerte de tu propia madre algunos años atrás.
“Qué pasa, mi querida?” tu tía preguntó y tomó tus manos, su mirada fue al rasgado y arrugado pergamino que sujetabas y a tu rostro pálido.
“El rey... él envió a Lord Georg aquí presente.” señalaste al hombre en la mesa.
“Y él... ” Incapaz hasta de pronunciar las palabras, le pasaste el pergamino a tu tía, persuadiéndola a leerlo.
Tomando el mensaje rasgado, Lady Nell lo alisó y lentamente leyó su contenido.
Observaste como los ojos de tu tía volaban sobre las palabras en la hoja, luego hizo una pausa, volviendo a leer el principio nuevamente.
“No,” la mujer jadeó con un horror tan profundo como el tuyo, luego giró hacia el hombre callado acomodado en la mesa. “Esto es una broma, mi lord? Porque si lo es, es una muy mala realmente.”
“No, mi lady.” El hombre del rey se movió incómodamente en la silla, pareciendo extrañamente culposo. Su mirada recorrió el recinto, mirando a todos los lugares menos a los ocupantes, entonces él dijo, “El rey dictó esa misiva en persona y me ordenó para traérsela. Debo llevar esta otra a Lord Kaulitz y volver aquí para el casamiento. El rey pensó que sería bueno darle tiempo a las personas para que preparen la celebración.”
“Pero...” hiciste una pausa y sacudiste la cabeza, intentando recomponerte. “Pero, esto no puede ser. Lord Kaulitz es un hombre maligno, repugnante y cruel. El rey no puede esperar que yo me case con él!”
Cuando Georg permaneció mudo, con su cabeza gacha, rehusándose a encontrar tus ojos, comenzaste a darte cuenta que realmente se esperaba que hicieras eso. Un sopor te invadió, suavizando el horror, y te sentaste pesadamente en el banco. Tenías que casarte con tu vecino repugnante, bastardo y cruel. Tom. El Martillo de Kaulitz. El hombre que había quemado las casas de los aldeanos sin ningún propósito.
Dios querido, qué te haría él cuando estuviese descontento contigo?
“Debe haber un error”, la tía Nell anunció firmemente, sacándote de tus pensamientos desesperados. “Seguramente el rey no sería tan cruel como para forzar a mi sobrina a casarse con ese hombre. Tal vez él simplemente no entendió la situación. Debemos viajar a la corte y explicarle todo. Debemos...”
“El rey ya no está en la corte”, Georg interrumpió solemnemente. “El fue a Chinon a ver al joven Gustav y a remover a algunos de los miembros de su corte”.
Nell y tu intercambiaron miradas sorprendidas ante la mención del hijo del rey. Fuiste tu quien dubitativamente murmuraste, “Remover miembros de su corte?”
“Mmmm”. El rostro de Georg estaba lleno de disgusto. “Si. Gustav desea organizar un casamiento entre la hija del Conde de Marines y el joven John. El conde parece interesado, pero quiere estar seguro que John tenga buenas perspectivas primero. El rey ofreció entregarle los castillos Loudon, Mirebeau y Chinon, pero el Gustav joven objeta la decisión. El sólo concederá esos castillos si su padre le permite gobernar Inglaterra, Normandía o Anjou por derecho propio”.
“El quiere más poder.” Nell suspiró con disgusto.
“Si”. Georg sacudió la cabeza solemnemente. “Era un error que el rey corone a su hijo mientras él mismo todavía vive. El muchacho quiere que el poder que viene con el título.”
“Pero qué tiene que ver eso con remover miembros de su corte?” Nell preguntó impacientemente.
“Ah, bien, el rey primero pensó en tomar a Gustav bajo custodia como advertencia, pero él cree que alejado de las influencias de los jóvenes cortesanos de Gustav, su hijo mayor se comportará de una manera más adulta”. Él habló francamente, entonces, pareciendo darse cuenta que estaba contando chismes, frunció el ceño y cambió de tema volviendo al asunto en cuestión. “En cualquier caso, ver al rey no haría ninguna diferencia. El ya tomó una decisión. El cree que usted, lady _____, y Lord Kaulitz deberían resolver sus problemas entre ustedes, y desea que el casamiento se lleve a cabo inmediatamente. Yo debo ser testigo de que sea así.”
Bajaste la cabeza, tu mirada se posó en el pergamino que tu tía todavía sujetaba, prueba de la decisión del Rey Gustav en el asunto. Estaba claramente escrito en el mensaje, pero por el momento las palabras de tu tía te dieron cierta esperanza. Si pudieses hablar con el rey, rogar su clemencia...
Un movimiento y un susurro detrás de tu hombro derecho te sacaron de tus pensamientos. Dándote vuelta, viste a Ducky. La criada estaba retorciendo sus manos, había pesar y miedo en su rostro mientras te observaba. Obviamente, la mujer había escuchado lo suficiente como para saber lo que el mensaje ordenaba, y ella no estaba menos horrorizada por la misiva que tu. Enderezándote, forzaste una sonrisa tranquilizadora en tu rostro para calmar a la criada, luego miraste a tu alrededor con un sobresalto cuando tu tía — la más dulce y educada de las ramas — de repente gritó como el carrero más boca sucia.
“De dónde carajo él sacó una idea tan lunática como esta?”
Usaste unos segundos para mirar azorada a tu tía, luego giraste para oír la respuesta de Georg. El no parecía ansioso por darla. De hecho, parecía bastante reticente. Culpa. El hombre se estaba moviendo en la silla con incomodidad. Estabas comenzando a sentir un extraño presentimiento cuando tu tía de repente manifestó esa sospecha en voz alta.
“Usted!”
Georg abruptamente se congeló, la expresión en su cara era la de un niño sorprendido mientras entra a robar a una despensa.
“Fue usted”, jadeaste con horror, insegura si preguntarle el por qué o simplemente ir a atacar la garganta del hombre. Antes de que pudieses hacer cualquiera de las dos cosas, Georg estaba de pie y yendo hacia el otro extremo de la mesa.
“Bien, debería estar partiendo ahora. Al rey no le gustan las demoras, y como Kaulitz no queda lejos... se está haciendo tarde y no se viaja tan de noche, no les parece?”
La pregunta era retórica, estabas segura. Por lo menos, el hombre no parecía dispuesto a permanecer para dar una respuesta. Se estaba moviendo en dirección a la puerta principal ahora y hablando muy rápidamente también. Deseaste que se atragantase con la comida que le habías servido.
“Fui informado que Lord Kaulitz está actualmente en camino a su casa después de haber realizado una tarea para el rey”, él continuó mientras tu tía comenzó a seguirlo lentamente, con los ojos estrechados y furiosos. “Así tendrán bastante tiempo para preparar el banquete de bodas. Me parece que deberían planearlo para el fin de la semana que viene. Eso parece lógico. Enviaré un mensajero por adelantado, de forma que puedan atender los detalles de último momento”. Fue lo último que dijo mientras salía por la puerta.
“Rata!” Nell dijo severamente una vez que la puerta de la fortaleza se cerró detrás de él.
Concordaste con su calificación, pero tenías otras preocupaciones más urgentes. “Por qué él le sugeriría al rey que Kaulitz y yo nos casemos?”
“Por qué, me pregunto yo?” tía Nell murmuró, luego retrocedió para colocar sus manos sobre tus hombros para reconfortarte.
“Por cierto no vas a casarte con él ?” Ducky jadeó, avanzando para unirse a ustedes. “No con Hammer?”
“Espero que no, Ducky. Verdaderamente lo espero”. Tus hombros se hundieron con tristeza.
“Qué harás?”
Frunciendo el ceño, comenzaste a retorcer tus manos mientras tu mente barajaba posibilidades. Huir? A dónde? Implorarle al rey? Cómo? él estaba determinado a que el casamiento se realizase el fin de semana. Matar a tu futuro marido? Una buena idea, pero no muy práctica, admitiste.
“Mi lady?” Ducky preguntó ansiosamente.
Suspiraste. “No estoy segura de que puedo hacer,” admitiste.
Ducky agrandó sus ojos con horror. “No puedes rehusarte? Sólo negarte y...”
“Y si el rey me manda a una abadía? Prefiero casarme con ese hombre y matarlo que ser encerrada en un monasterio! Quién cuidaría de mi gente si eso sucediese? Hammer. Tiernay sería entregada a él como mi dote si me rehuso a cumplir las órdenes del rey. ”
Ducky se mordió el labio, luego se inclinó más cerca para susurrar. “Maggie sabe bastante sobre hierbas. O la vieja Joan, la Curandera. Ella podría saber de algo que podríamos darle a él...”
“Muérdete la lengua,” la retaste, cubriendo la boca de la criada con tu mano y mirando nerviosamente el gran salón vacío. “Nunca quiero oír una sugestión así de vos nuevamente, Ducky. Podrías terminar ahorcada en el patio.”
“Pero, qué harás?” La criada parecía triste cuando quitaste tu mano de su boca. “No puedes casarte con Hammer”.
Suspiraste nuevamente. “Parece que tendré que hacerlo. No puedo negarme a una orden directa del rey.”
“Por qué no?” Ducky preguntó frenéticamente. “Hammer hace eso muy frecuentemente. Por qué, él...”
“Es la solución!” la tía Nell, quien había estado muda y pensativa en esos minutos, agarró tus brazos excitadamente, sin darse cuenta te dio una sacudida.
“Qué?” preguntaste con un rayo de esperanza.
“Vos no puedes rehusarte. Pero Hammer puede. El es un lord demasiado poderoso como para que el rey pueda forzarlo, si él realmente desea negarse.”
Ducky bufó. “Y realmente piensas que Hammer va a querer negarse a casarse con ella? Mírala! Ella es tan bonita como su madre lo era. Y también más dulce que la miel. Y también están sus tierras. Quién se rehusaría a recibir una dote como Tiernay?”
Decaíste ligeramente, pero la tía Nell simplemente enderezó tus hombros y habló. “Entonces debemos hacer que vos y Tiernay sean menos atractivos”.
Ducky pareció dudosa. “Georg ya vio que ella es una muchacha bonita. No puedes de repente ennegrecerle los dientes y afeitarle la cabeza.”
“No”, concordaste lentamente, una sonrisa pequeña se curvó en tus labios mientras una idea genial nacía en tu mente. “Pero hay otras cosas que podemos hacer.”
Bueno espero les gustara =)
═─ »Capitulo 2
“No puede ser!” te sentiste mareada y asqueada. Sintiéndote temblar, sacudiste la cabeza determinadamente y escrutaste la cara de Georg. “Seguramente esto es una broma?”
Estabas tan enojada que ni notaste que estabas agitando el pergamino mientras mirabas a Lord Georg. Ni tampoco notaste la súbita preocupación en la cara del hombre mientras él lentamente sacudía la cabeza. “No, mi lady. El rey no hace bromas.”
“Pero debe ser... El no puede... Esto es... ” tropezabas con tus palabras cuando se oyó el sonido de pasos acercándose. Te diste vuelta, aliviada de ver a tu tía entrando en el recinto. La tía Nell siempre era la voz de la razón. Ella sabría qué hacer con esa… situación.
“Tia Nell!” hasta tu te quedaste sorprendida con el tono desesperado de tu voz mientras te levantabas de la silla y te apresuraba a saludar a tu tía que había sido como una madre para ti desde la muerte de tu propia madre algunos años atrás.
“Qué pasa, mi querida?” tu tía preguntó y tomó tus manos, su mirada fue al rasgado y arrugado pergamino que sujetabas y a tu rostro pálido.
“El rey... él envió a Lord Georg aquí presente.” señalaste al hombre en la mesa.
“Y él... ” Incapaz hasta de pronunciar las palabras, le pasaste el pergamino a tu tía, persuadiéndola a leerlo.
Tomando el mensaje rasgado, Lady Nell lo alisó y lentamente leyó su contenido.
Observaste como los ojos de tu tía volaban sobre las palabras en la hoja, luego hizo una pausa, volviendo a leer el principio nuevamente.
“No,” la mujer jadeó con un horror tan profundo como el tuyo, luego giró hacia el hombre callado acomodado en la mesa. “Esto es una broma, mi lord? Porque si lo es, es una muy mala realmente.”
“No, mi lady.” El hombre del rey se movió incómodamente en la silla, pareciendo extrañamente culposo. Su mirada recorrió el recinto, mirando a todos los lugares menos a los ocupantes, entonces él dijo, “El rey dictó esa misiva en persona y me ordenó para traérsela. Debo llevar esta otra a Lord Kaulitz y volver aquí para el casamiento. El rey pensó que sería bueno darle tiempo a las personas para que preparen la celebración.”
“Pero...” hiciste una pausa y sacudiste la cabeza, intentando recomponerte. “Pero, esto no puede ser. Lord Kaulitz es un hombre maligno, repugnante y cruel. El rey no puede esperar que yo me case con él!”
Cuando Georg permaneció mudo, con su cabeza gacha, rehusándose a encontrar tus ojos, comenzaste a darte cuenta que realmente se esperaba que hicieras eso. Un sopor te invadió, suavizando el horror, y te sentaste pesadamente en el banco. Tenías que casarte con tu vecino repugnante, bastardo y cruel. Tom. El Martillo de Kaulitz. El hombre que había quemado las casas de los aldeanos sin ningún propósito.
Dios querido, qué te haría él cuando estuviese descontento contigo?
“Debe haber un error”, la tía Nell anunció firmemente, sacándote de tus pensamientos desesperados. “Seguramente el rey no sería tan cruel como para forzar a mi sobrina a casarse con ese hombre. Tal vez él simplemente no entendió la situación. Debemos viajar a la corte y explicarle todo. Debemos...”
“El rey ya no está en la corte”, Georg interrumpió solemnemente. “El fue a Chinon a ver al joven Gustav y a remover a algunos de los miembros de su corte”.
Nell y tu intercambiaron miradas sorprendidas ante la mención del hijo del rey. Fuiste tu quien dubitativamente murmuraste, “Remover miembros de su corte?”
“Mmmm”. El rostro de Georg estaba lleno de disgusto. “Si. Gustav desea organizar un casamiento entre la hija del Conde de Marines y el joven John. El conde parece interesado, pero quiere estar seguro que John tenga buenas perspectivas primero. El rey ofreció entregarle los castillos Loudon, Mirebeau y Chinon, pero el Gustav joven objeta la decisión. El sólo concederá esos castillos si su padre le permite gobernar Inglaterra, Normandía o Anjou por derecho propio”.
“El quiere más poder.” Nell suspiró con disgusto.
“Si”. Georg sacudió la cabeza solemnemente. “Era un error que el rey corone a su hijo mientras él mismo todavía vive. El muchacho quiere que el poder que viene con el título.”
“Pero qué tiene que ver eso con remover miembros de su corte?” Nell preguntó impacientemente.
“Ah, bien, el rey primero pensó en tomar a Gustav bajo custodia como advertencia, pero él cree que alejado de las influencias de los jóvenes cortesanos de Gustav, su hijo mayor se comportará de una manera más adulta”. Él habló francamente, entonces, pareciendo darse cuenta que estaba contando chismes, frunció el ceño y cambió de tema volviendo al asunto en cuestión. “En cualquier caso, ver al rey no haría ninguna diferencia. El ya tomó una decisión. El cree que usted, lady _____, y Lord Kaulitz deberían resolver sus problemas entre ustedes, y desea que el casamiento se lleve a cabo inmediatamente. Yo debo ser testigo de que sea así.”
Bajaste la cabeza, tu mirada se posó en el pergamino que tu tía todavía sujetaba, prueba de la decisión del Rey Gustav en el asunto. Estaba claramente escrito en el mensaje, pero por el momento las palabras de tu tía te dieron cierta esperanza. Si pudieses hablar con el rey, rogar su clemencia...
Un movimiento y un susurro detrás de tu hombro derecho te sacaron de tus pensamientos. Dándote vuelta, viste a Ducky. La criada estaba retorciendo sus manos, había pesar y miedo en su rostro mientras te observaba. Obviamente, la mujer había escuchado lo suficiente como para saber lo que el mensaje ordenaba, y ella no estaba menos horrorizada por la misiva que tu. Enderezándote, forzaste una sonrisa tranquilizadora en tu rostro para calmar a la criada, luego miraste a tu alrededor con un sobresalto cuando tu tía — la más dulce y educada de las ramas — de repente gritó como el carrero más boca sucia.
“De dónde carajo él sacó una idea tan lunática como esta?”
Usaste unos segundos para mirar azorada a tu tía, luego giraste para oír la respuesta de Georg. El no parecía ansioso por darla. De hecho, parecía bastante reticente. Culpa. El hombre se estaba moviendo en la silla con incomodidad. Estabas comenzando a sentir un extraño presentimiento cuando tu tía de repente manifestó esa sospecha en voz alta.
“Usted!”
Georg abruptamente se congeló, la expresión en su cara era la de un niño sorprendido mientras entra a robar a una despensa.
“Fue usted”, jadeaste con horror, insegura si preguntarle el por qué o simplemente ir a atacar la garganta del hombre. Antes de que pudieses hacer cualquiera de las dos cosas, Georg estaba de pie y yendo hacia el otro extremo de la mesa.
“Bien, debería estar partiendo ahora. Al rey no le gustan las demoras, y como Kaulitz no queda lejos... se está haciendo tarde y no se viaja tan de noche, no les parece?”
La pregunta era retórica, estabas segura. Por lo menos, el hombre no parecía dispuesto a permanecer para dar una respuesta. Se estaba moviendo en dirección a la puerta principal ahora y hablando muy rápidamente también. Deseaste que se atragantase con la comida que le habías servido.
“Fui informado que Lord Kaulitz está actualmente en camino a su casa después de haber realizado una tarea para el rey”, él continuó mientras tu tía comenzó a seguirlo lentamente, con los ojos estrechados y furiosos. “Así tendrán bastante tiempo para preparar el banquete de bodas. Me parece que deberían planearlo para el fin de la semana que viene. Eso parece lógico. Enviaré un mensajero por adelantado, de forma que puedan atender los detalles de último momento”. Fue lo último que dijo mientras salía por la puerta.
“Rata!” Nell dijo severamente una vez que la puerta de la fortaleza se cerró detrás de él.
Concordaste con su calificación, pero tenías otras preocupaciones más urgentes. “Por qué él le sugeriría al rey que Kaulitz y yo nos casemos?”
“Por qué, me pregunto yo?” tía Nell murmuró, luego retrocedió para colocar sus manos sobre tus hombros para reconfortarte.
“Por cierto no vas a casarte con él ?” Ducky jadeó, avanzando para unirse a ustedes. “No con Hammer?”
“Espero que no, Ducky. Verdaderamente lo espero”. Tus hombros se hundieron con tristeza.
“Qué harás?”
Frunciendo el ceño, comenzaste a retorcer tus manos mientras tu mente barajaba posibilidades. Huir? A dónde? Implorarle al rey? Cómo? él estaba determinado a que el casamiento se realizase el fin de semana. Matar a tu futuro marido? Una buena idea, pero no muy práctica, admitiste.
“Mi lady?” Ducky preguntó ansiosamente.
Suspiraste. “No estoy segura de que puedo hacer,” admitiste.
Ducky agrandó sus ojos con horror. “No puedes rehusarte? Sólo negarte y...”
“Y si el rey me manda a una abadía? Prefiero casarme con ese hombre y matarlo que ser encerrada en un monasterio! Quién cuidaría de mi gente si eso sucediese? Hammer. Tiernay sería entregada a él como mi dote si me rehuso a cumplir las órdenes del rey. ”
Ducky se mordió el labio, luego se inclinó más cerca para susurrar. “Maggie sabe bastante sobre hierbas. O la vieja Joan, la Curandera. Ella podría saber de algo que podríamos darle a él...”
“Muérdete la lengua,” la retaste, cubriendo la boca de la criada con tu mano y mirando nerviosamente el gran salón vacío. “Nunca quiero oír una sugestión así de vos nuevamente, Ducky. Podrías terminar ahorcada en el patio.”
“Pero, qué harás?” La criada parecía triste cuando quitaste tu mano de su boca. “No puedes casarte con Hammer”.
Suspiraste nuevamente. “Parece que tendré que hacerlo. No puedo negarme a una orden directa del rey.”
“Por qué no?” Ducky preguntó frenéticamente. “Hammer hace eso muy frecuentemente. Por qué, él...”
“Es la solución!” la tía Nell, quien había estado muda y pensativa en esos minutos, agarró tus brazos excitadamente, sin darse cuenta te dio una sacudida.
“Qué?” preguntaste con un rayo de esperanza.
“Vos no puedes rehusarte. Pero Hammer puede. El es un lord demasiado poderoso como para que el rey pueda forzarlo, si él realmente desea negarse.”
Ducky bufó. “Y realmente piensas que Hammer va a querer negarse a casarse con ella? Mírala! Ella es tan bonita como su madre lo era. Y también más dulce que la miel. Y también están sus tierras. Quién se rehusaría a recibir una dote como Tiernay?”
Decaíste ligeramente, pero la tía Nell simplemente enderezó tus hombros y habló. “Entonces debemos hacer que vos y Tiernay sean menos atractivos”.
Ducky pareció dudosa. “Georg ya vio que ella es una muchacha bonita. No puedes de repente ennegrecerle los dientes y afeitarle la cabeza.”
“No”, concordaste lentamente, una sonrisa pequeña se curvó en tus labios mientras una idea genial nacía en tu mente. “Pero hay otras cosas que podemos hacer.”
Bueno espero les gustara =)
jueves, 11 de agosto de 2011
─═☆ Vecinos┊Adaptación ☆═─ » Capitulo 1
Bueno espero le guste, aquí les dejo el capitulo 1!!!
Inglaterra, 1173
“Maldición!” El Rey Gustav abolló el rollo de papel que había leído en una bola y lo lanzó al piso con disgusto. Pasó un momento murmurando sobre las manías y obsesiones de las mujeres, luego suspiró con resignación y extendió su mano hacia Georg. “Puedes darme el mensaje de Lord Kaulitz”.
Las cejas del hombre se arquearon con asombro ante el pedido, un poco de miedo mezclado con desconfianza aparecieron en sus ojos. “Cómo lo sabe?”
“No es magia ni adivinación ni nada parecido, Georg, simplemente experiencia. Nunca recibo un reclamo de Lady Tiernay sin que reciba un mensaje de Lord Kaulitz. Además, vi a su hombre cabalgando más temprano y asumí que él traía un mensaje. Ha habido algunas pequeñas insurrecciones en Normandía, y le pedí a Tom que se ocupase de ellas por mí. Sin duda él está esperándome para hablarme sobre eso”.
“Ah”. Relajándose, el hombre le dio el documento en cuestión.
Gustav abrió el pergamino un poco irritado por tener que explicar todo. Georg solo estaba trabajando en reemplazo de su capellán hacía dos días—su secretario habitual estaba enfermo—pero Gustav ya estaba deseando su pronta recuperación. Su substituto era un hombre muy nervioso y supersticioso, y parecía estar extremamente dispuesto a creer en la reputación Gustav como la semilla del diablo”. Sacudiendo la cabeza, Gustav enfocó su atención en el pergamino que ahora sujetaba. Un momento más tarde, estaba arrugando el pergamino y lanzando el bollo al piso no lejos del primero, y Gustav se puso de pie para empezar a caminar impacientemente delante de su trono.
Como esperaba, Lord Kaulitz había sofocado las pequeñas revueltas en Normandía y estaba en camino a su casa. Pero él también había agregado un reclamo o dos sobre su vecina. Parecía que su vasallo se sentía poderosamente hostilizado por la Lady de Tiernay y estaba asediando al rey con cartas respecto a esa mujer.
En el mensaje el Martillo de Kaulitz respetuosamente solicitaba que el rey hiciese algo respecto a esa mujer… o, él mismo, lo haría.
Sonaba muy parecido a una amenaza, y a Gustav le desagradaba mucho ser amenazado por uno de sus vasallos. De hecho, si Tom no fuese un guerrero tan valioso y no lo hubiese ayudado tan frecuentemente en los últimos diez años, lo habría hecho castigar. Pero, a diferencia de su padre, Tom había sido un hombre muy útil.
El rey hizo una mueca al pensar en el previo Lord de Kaulitz, el padre de Tom. Nacido como segundo hijo, Jörg había esperado tener permiso para unirse a un monasterio y vivir su vida rodeado por los polvorosos escritos papales que tanto adoraba.
Desgraciadamente, su hermano primogénito había muerto, forzándolo a abandonar esos planes a favor de un matrimonio que produjese un heredero. El hombre había descargado todo su resentimiento en su hijo.
Para ser honesto, en opinión de Gustav, Jörg había sido un loco. Afortunadamente, Tom todavía no había demostrado la misma tendencia. Desgraciadamente — para Tom, por lo menos —tampoco había demostrado la ansiedad por aprender lo que su padre había pasado, y ellos dos no se habían llevado nada bien. El odio de Jörg dirigido al muchacho lo había hecho huir de su casa y presentarse al servicio de Gustav cuando había ganado sus espuelas como caballero.
Ah, si la pérdida de Jörg había sido una ganancia para él, Gustav decidió. Pero eso no eximía a Tom de su obligación para respetar a su rey.
“Qué mierda voy a hacer con estos dos?” el rey preguntó a frustración.
“No estoy seguro, su excelencia. Cuál es el problema exactamente?” Georg preguntó tentativamente.
“Me doy cuenta que ambos están reclamando — y por su reacción, diría que bastante frecuentemente— pero, de qué se quejan exactamente?”
Gustav giró para lanzarle una mirada feroz, abriendo la boca para explicarle que su pregunta había sido retórica, cuando cambió de idea.
Por el contrario, él dijo, “Lady Tiernay me escribe para advertirme del comportamiento cruel y abusivo de su vecino hacia sus siervos y los aldeanos, porque ella sabe que yo no deseo ver a ninguno de mis súbditos siendo maltratados”.
“Ah... ” Georg dijo nuevamente, reprimiendo una sonrisa sarcástica ante la imitación del rey de la voz chillona de mujer. “Y Lord Kaulitz, de qué se queja?”
Gustav lanzó una carcajada. “El me escribe diciendo que Lady Tiernay es entrometida, chismosa y una arpía que le hace la vida imposible”.
“Hmmm”. El nuevo capellán se quedó callado por un momento, luego murmuró, “Su excelencia, la esposa de Kaulitz no murió varios años atrás?”
“Si. Diez años atrás. En un parto. Y Tom ha sido mi mejor guerrero desde entonces.
Siempre dispuesto para pelear, siempre en campaña con mis misiones. No sé qué haría sin él”.
“Lady Tiernay no perdió a su marido cuatro o cinco años atrás?”
“Qué?!!” Gustav frunció el ceño brevemente, luego su expresión se relajó. “Oh, no. Ese era su padre. Lady Tiernay nunca se casó. Una negligencia de su padre por no haberse ocupado de eso antes de su morir”.
“Ella está en edad casadera, entonces?”
“Oh, si. Ella ha pasado la edad para casarse, me parece. Ella debe tener…”
Gustav hizo una pausa, calculando mentalmente. “Creo que ella debe tener veinti... y pico de años”. Gimiendo, él apoyó su mano en el trono. “Y hay otro problema. Debería haberla casado hace rato. Cómo carajo pueden esperar que le encuentre un marido a una arpía como ella?” Nuevamente, el rey comenzó a caminar inquietamente.
“Tal vez ya haya encontrado uno, se excelencia”, Georg ofreció con osadía. Cuando el rey lo miró severamente, él encogió los hombros. “Quizás la solución sea hacer que Lord Kaulitz se case con ella. Resolverá ambos problemas de una sola vez. Ella estará casada, y ellos se verán forzados a resolver sus conflictos solos, sin molestar al rey”.
“Ellos se van a matar en menos de una semana!” Gustav predijo con disgusto.
“Quizás”. Georg hizo una pausa ingenuamente. “Pero aún así ambos problemas estarán resueltos, o no?”
Gustav lo contempló con admiración. “Maldición, Georg”, él finalmente jadeó. “Tienes una mente aguda y maliciosa”. él se apresuró a volver a su trono y empezó a hablar excitadamente. “Debes escribir dos mensajes en mi nombre… y llevar adelante este plan!” Entonces se dio vuelta hacia el capellán con una mirada peligrosa en sus ojos. “Y, Georg,” él agregó. “No me falles”.
═─ » Capítulo 1
Nadie se sorprendió cuando pateaste la pelota. Solamente habías hecho una pausa en tu camino a través del patio para observar jugar a los niños cuando la pelota de trapo de repente rodó en dirección tuya, y _____ impulsivamente la pateaste. Fue un error.
Goliath, quien estaba a tu lado como siempre, interpretó eso como una señal de que iban a jugar. El corrió detrás de la pelota en un segundo, ladrando alegremente y corriendo como el viento. Intentaste llamarlo de vuelta, pero tu voz fue fácilmente tapada por los gritos de los niños que empezaron a correr detrás del enorme perro. Goliath alcanzó la pelota primero. Desgraciadamente, él no entendía las reglas del juego y, como animal de caza, no la trajo de vuelta inmediatamente. Por el contrario, la tomó entre sus mandíbulas fuertes y la mordió.
No pudiste oír el material rasgándose, pero supusiste lo que sucedía cuando las plumas de repente llenaron el aire alrededor de la bestia. Satisfecho porque había matado a su presa, Goliath caminó alegremente por al lado de los niños desesperados para soltar la pelota arruinada tus pies. Luego se sentó cómodamente sobre sus patas delanteras lo que consideraste el retrato vivo de la satisfacción. Sacudiendo la cabeza, te curvaste para levantar y examinar el juguete dañado.
“Mi lady?”
Sacaste su atención de la pelota y miraste a las dos mujeres que aparecieron a tu lado. “Si?”
“Esta es Maggie,” Ducky dijo suavemente. Ducky era tu criada, y también una buena amiga. Si ella había traído a esa otra mujer con ella, era porque había algo que las dos necesitaban. Estudiando amablemente a la mujer mayor, decidiste que te gustaba lo que veías.
“Hola, Maggie.” saludaste a la mujer, luego ladeaste tu cabeza ligeramente. “Nos sos de Tiernay.” No era una pregunta. Conocías a todas tu gente; te esforzabas por conocerlos a todos. Esa mujer no era uno de ellos.
“No, mi lady. Vengo de Kaulitz.”
Tus labios se apretaron con la noticia. Eso sólo podía significar problemas. Tus pensamientos fueron distraídos por un murmullo de descontento cuando los niños llegaron y se pusieron alrededor tuyo. Sus pequeños ojos acusadores movieron hacia Goliath y al juguete ahora inservible.
“Voy a arreglar eso”, aseguraste culposamente, aliviándote cuando viste que la promesa parecía satisfacerlos. “Ven”.
La orden era para Goliath, quien inmediatamente se puso de pie para seguirte, mientras te dirigías a la fortaleza, y las mujeres te obedecieron también. Ducky y Maggie prontamente te alcanzaron mientras los niños corrían detrás de ustedes. Cruzaron el patio, subieron los escalones y entraron a la fortaleza de Tiernay.
“Voy a necesitar algunas plumas, Ducky,” anunciaste mientras cruzabas el gran salón.
“Si, mi lady”. La mujer partió rumbo a las cocinas donde el Cocinero había estado pelando gallinas toda la mañana para la comida de la noche.
“Ustedes niños vayan a esperar a la mesa. Voy a hacer que Ducky les traiga algo para beber y dulces mientras esperan.” Diciendo eso, llevaste a Maggie y a Goliath hacia dos sillas que había cerca del fuego. Sentándote en tu lugar habitual, le hiciste señas a la mujer para que tomase el otro lugar, luego comenzaste a revisar en la pequeña cesta buscando tu aguja de costura e hilo. Goliath se acomodó en el piso a tus pies.
Estabas consciente del modo en que la mujer vaciló, luego se sentó incómodamente en el borde de su silla. Acababas de encontrar los dos artículos necesarios cuando Ducky apareció a tu lado con una fuente de madera conteniendo las plumas solicitadas.
“Gracias”. Aceptaste la fuente y sonreiste a la mujer.
“Podrías buscar a alguien para que les traiga a los niños algunos refrescos y dulces mientras ellos esperan?”
“Si, mi lady”.
Colocaste el hilo en la aguja, tu atención enfocada en la tarea mientras le preguntabas a Maggie, “Entonces, sos de Kaulitz?”
“Si”. La mujer aclaró su garganta y se movió incómodamente en su silla.
“Solía estar a cargo de las criadas allá”.
“Solía?” preguntaste. Levantaste la vista al tiempo de notar la amargura que cruzó la cara de la criada.
“Si. Fui echada de allá”, la mujer admitió reticentemente. Un minuto más tarde ella reveló, “El lord sólo quería jóvenes bonitas como criadas para servir en las habitaciones”.
Tu boca se apretó. Esa noticia no te sorprendía. Muy poco podía sorprenderte respecto al comportamiento de Hammer* Kaulitz. (*Hammer en inglés significa martillo). El trabajo y los servicios duros frecuentemente no eran Retribuidos amablemente por ese hombre. Cruel y bastardo, pensaste con irritación, entonces te forzaste a comenzar a remendar el rasgón de la pelota de los niños.
Después de varios puntos te sintiste suficientemente tranquila para preguntar, “Y qué has estado haciendo desde entonces?”
La mujer aclaró su garganta nuevamente. “El granjero White me estuvo cortejado hasta entonces. El era viudo”, ella explicó, ruborizándose como una muchacha adolescente. “Cuando me echaron, nos casamos. Atendí su casa y lo ayudé en la granja.” Su sonrisa y el rubor se debilitaron, dando lugar a la palidez y el cansancio. “El murió dos semanas atrás”.
“Lo siento mucho”, dijiste. Lágrimas saltaron a los ojos de la mujer, Maggie bajó la cabeza, y volviste tu atención a tu tarea.
Abriste la pelota y comenzaste a llenarla con plumas. Casi habías terminado con la tarea cuando Maggie se recuperó lo suficiente como para continuar.
“Supe que habría problemas. Yo no podía administrar la granja sola, por supuesto…”
“El te echó de allí y le dio la granja a otra pareja,” adivinaste.
No era un hecho infrecuente, pero en tu opinión era cruel tratar tan mal a alguien que había trabajado tan duramente y fielmente por tanto tiempo.
Maggie sacudió la cabeza. “Como siempre el envió al pobre joven Stephen para hacer el trabajo sucio.”
Sacudiste la cabeza. Stephen era el segundo en comando de Lord Kaulitz, el hombre dejado a cargo de Kaulitz mientras Hammer estaba afuera. Lo que parecía ser bastante frecuentemente. Lord Kaulitz siempre parecía estar involucrado en una u otra batalla. Pero aunque Stephen era el administrador del Castillo de Kaulitz, ninguna de las decisiones eran suyas. Seguramente Hammer le ordenaba al hombre que hiciera una u otra cosa— ninguna de ellas muy agradable. El joven Stephen sufría horriblemente por ser forzado a ejecutar tales acciones malvadas.
“Hizo que Stephen confiscase todo lo que había en la cabaña en nombre del impuesto”, Maggie continuó, llamando tu atención de vuelta hacia ella. “Entonces ordenó quemar todo eso delante de mí y me echó.”
Tus ojos se agrandaron incrédulamente. Se trataba de un impuesto de morte, un aspecto legal del sistema feudal. Pero confiscar hasta la última posesión, y luego quemar todo… bien, eso era directamente cruel. Deliberadamente cruel. “Stephen hizo eso?”
Maggie hizo una mueca. “Si. Él es un criado fiel. Se disculpó mientras, hacía eso.”
Sacudiste la cabeza solemnemente mientras terminabas de llenar la pelota y te preparabas para coser la parte final. Obviamente el joven Stephen había hecho eso. El cumplía órdenes de su lord.
“Su madre habría llorado al verlo forzado a actuar de ese modo.”
Levantaste la vista interrogativamente ante las palabras de la mujer y Maggie explicó. “Nosotras éramos amigas cuando ella vivía en la aldea. Se le habría roto el corazón.”
“Ella está muerta?” educadamente preguntaste, sabiendo que la criada necesitaba cambiar de tema para mantener la compostura. Pero si hablar sobre la madre de Stephen la ayudaría a poner distancia de sus pérdidas recientes, no veías razón para no complacerla.
“Oh, no. Ella no está muerta. Pero cuando Stephen fue nombrado administrador y fue forzado a ejecutar estos castigos severos… Bien, ella no pudo aguantar ser testigo de eso. Ella dejó la aldea. La mayoría de las personas piensan que ella está muerta, pero yo creo que ella está viviendo en la frontera entre Tiernay y Kaulitz. Stephen frecuentemente cabalga para ese lado y desaparece toda la tarde. Creo que la está visitando”. Ella se silenció por un momento, luego agregó, “El partió con ese rumbo después de quemar mis cosas. Probablemente también fue a visitarla en esa ocasión.”
Observaste la expresión perdida en la cara de la mujer y el modo en que ella se hundía en la silla y suavemente dejiste, “Y entonces viniste a Tiernay.”
“Si”. Maggie se sentó un poco más derecha. “Mi hija se casó con o el cantinero de la aldea diez años atrás.”
Sacudiste la cabeza. Conocías al dueño de la cantina y a su esposa.
“Y ellos se ofrecieron a llevarme con ellos… pero ellos deben tener su permiso primero.”
Te quedaste callada por varios segundos. Eras responsable de las tierras y de toda la gente que vivía en ella, y entonces, como la mujer decía, tu permiso era imperativo antes que cualquiera de los inquilinos pudiesen mudarse. Tu primer instinto era simplemente asentir y decirle a Maggie que era bienvenida en Tiernay. Pero habías notado un tono extraño en la mujer cuando había hablado de la oferta de su hija. No había duda de que Maggie había trabajado toda su vida. Perder su puesto en el Castillo de Kaulitz debía haber sido muy desmoralizante. Su casamiento y posición como esposa del granjero habían salvado un poco de su orgullo, pero ahora estaba reducida a aceptar la caridad de su propia hija. Sospechabas que eso irritaba a la mujer, y ahora, considerando el asunto seriamente, sacudiste la cabeza. “No.”
“No?” Maggie parecía a punto de estallar en lágrimas, y mentalmente te retaste por expresar tus pensamientos en voz alta.
“No habrá caridad para vos, Maggie. Vos todavía sos fuerte y saludable. Puedes trabajar. Y sucede que me está faltando alguien con sus habilidades.”
Maggie perdió su mirada trágica, y la esperanza lentamente llenó su rostro mustio.
“Si. Edwith solía estar a carga de mis criadas aquí. Ella murió un mes atrás y todavía no tengo con quien substituirla. Ducky tiene que ocuparse de ese trabajo mientras también atiende sus propios deberes. Estarías haciéndonos un gran favor si tomase el lugar de Edwith. Le sacaría un gran fardo a Ducky.”
“Oh!” Para tu preocupación, la mujer repentinamente empezó a llorar. Por un momento, temiste haberte equivocado y que Maggie deseaba quedarse con su hija. Entonces la mujer te sonrió entre las lágrimas, y te relajaste.
“Oh, mi lady. Gracias”, la nueva jefa de criadas jadeó, positivamente contenta con la idea de ser útil nuevamente.
“Gracias”, dijiste firmemente, luego le sonreíste a Ducky, quien de repente apareció a tu lado. “Tal vez Ducky podría hacer con vos un recorrido por el castillo y presentarte a las muchachas que estarán bajo tu dirección”.
“Claro”. Ducky le sonrió a la otra mujer, luego te miró de vuelta.
“Boswell dice que hay un grupo aproximándose.”
“Un grupo?” levantaste una ceja interrogativamente, y Ducky sacudió la cabeza asintiendo.
“Si. Ellos llevan el estandarte del rey”.
Hiciste una pausa, luego sonreíste ampliamente. “Bien, bien. Si llegas a ver a mi tía en tu recorrida, cuéntale la noticia.” Con eso, rápidamente diste la última puntada a la pelota, amarraste y cortaste el hilo. Las dos mujeres se marcharon, y llevaste la pelota a la mesa donde sus dueños todavía estaban comiendo y bebiendo.
“Aquí tienen,” dijiste alegremente, colocando la pelota en la mesa. “Como nueva. Apresúrense con la comida, luego vayan afuera a jugar. Es un día demasiado lindo para estar en un lugar cerrado.”
Corriste hacia la puerta de la fortaleza, sacudiendo tu falda mientras te movía.
Los viajantes estaban atravesando los portones del patio cuando saliste a la luz.
Esperaste que Goliath te alcanzase, luego cerraste la puerta detrás del perro y rápidamente alisaste tu cabello. Te sintiste nerviosa.
Ese era un grupo del rey, Ducky había dicho, y podías ver que tu criada tenía razón. El estandarte de Gustav II flotaba a la vista de todos — y tu lo estabas mirando. Había llegado el día. El rey probable estaba respondiendo finalmente a las muchas cartas que le habías mandado respecto a Lord Kaulitz.
Esa era la única explicación para esa visita.
Le hizo bien a tu corazón. Habías comenzado a temer que el rey fuese indiferente al comportamiento frío y hasta cruel de tu vecino. Te habías sentido frustrada e impotente por tu incapacidad para hacer algo más que observar a los siervos y aldeanos de Kaulitz escapando y buscando refugio en Tiernay, y escribir cartas de protesta. Porque, algunas veces hasta habías llegado tan lejos como comprar a las posibles futuras víctimas de Kaulitz y salvarlas de la ira del hombre. Lord Tom, el Hammer de Kaulitz, ciertamente era el diablo con forma humana.
Pero finalmente el rey había enviado a alguien para ocuparse del asunto. Por lo menos, eso asumías, que él había enviado a alguien. Esa compañía de hombres era muy pequeña para contar al rey entre ellos. No. El obviamente había enviado a un hombre en su lugar para atender el asunto, y eso te parecía bien. El caso muy probablemente no fuese de mucha importancia para el rey; pues sólo afectaba a aquellos a quien Hammer abusaba. Comparado con las miserias de todo el reino, ese era un problema menor. De hecho, las personas de Kaulitz eran muy afortunados porque el rey Gustv estaba ocupándose personalmente del asunto.
Ese pensamiento te alegró, esperaste pacientemente hasta que el grupo de hombres alcanzó la parte inferior de los escalones de entrada; entonces fuiste a saludarlos, con Goliath a tu lado.
“Lady Tiernay?” Era el más rubio del grupo quien la saludó. El tenía una expresión esperanzada.
“Si. Viene de parte del rey”. Declaraste lo obvio, y el caballero sacudió la cabeza, una sonrisa se curvó en sus labios mientras tomaba tu mano y se inclinaba para depositar un beso sobre tus nudillos. “Lord Georg, a su disposición.”
“Es bienvenido aquí en Tiernay, Lord Georg,” dijiste formalmente, luego colocaste la mano sobre tu brazo y giraste en dirección a los escalones. “Debe estar hambriento y sediento después del viaje. Permítame darle la bienvenida con comida y bebida”.
Sacudiendo la cabeza, Lord Georg subió los escalones contigo, dando órdenes por encima de su hombro mientras avanzaban. Casi alcanzaban la puerta de la fortaleza cuando el grupo de niños salió. Riendo y gritando en un segundo, y azorados y mudos al siguiente. Viendo a Lord Georg y a ti, el grupo murmuró sus disculpas y bajó los escalones, para lanzarse en una carrera ruidosa una vez que estaban en el patio. Sonreíste e ignoraste la mirada interrogativo que Georg te lanzó.
Haciéndolo entrar, guiaste al hombre del rey hacia la mesa que los niños habían dejado. Lo acomodaste en la silla de la cabecera que tu padre siempre había ocupado, luego te excusaste para hacer un viaje rápido a las cocinas. Volviste minutos más tarde con un grupo de criados siguiéndote, trayendo la mejor comida y el mejor vino disponible en la Fortaleza Tiernay, en tus más bellas bandejas de plata. Después que nerviosamente supervisaste el servicio de Lord Georg, te acomodó al lado de él y sorbiste calladamente de un jarro con aguamiel mientras él comía. Estabas impaciente por confirmar el propósito de su visita, pero sabías que sería rudo hacer eso antes que él satisficiese su hambre y su sed.
Afortunadamente para tu estado de ánimo, Georg no era un hombre de perder tiempo saboreando la comida. El devoró una cantidad asombrosa de comida —y aún más de vino — en un instante, luego se sentó hacia atrás con un suspiro satisfecho y sonrió.
“Debo elogiar su buena mesa, mi lady”.
“Gracias, mi lord”, murmuraste, preguntándote como sacar el tema del propósito de su viaje. Georg pronto puso fin a esa preocupación sacando un rollo de papel de entre sus ropajes voluminosos.
“Le traigo noticias del rey”. él colocó el pergamino delante tuyo, luego aguardó a que lo leyeses.
Con manos de repente temblorosas, rompiste el sello y rápidamente desenrollaste el pergamino, tu mente febrilmente evaluando las posibilidades de como el rey tenía intención de castigar tu vecino por el tratamiento rudo que le daba a las personas.
Designar a alguien para vigilarlo? Imponerle una multa? Castigarlo?
“Casarme con él? ” Las palabras parecieron gritar desde el pergamino mientras leías su contenido.
Comenten que les pareció, creo que ahora ya pueden comentar con esta plantilla =)
Inglaterra, 1173
“Maldición!” El Rey Gustav abolló el rollo de papel que había leído en una bola y lo lanzó al piso con disgusto. Pasó un momento murmurando sobre las manías y obsesiones de las mujeres, luego suspiró con resignación y extendió su mano hacia Georg. “Puedes darme el mensaje de Lord Kaulitz”.
Las cejas del hombre se arquearon con asombro ante el pedido, un poco de miedo mezclado con desconfianza aparecieron en sus ojos. “Cómo lo sabe?”
“No es magia ni adivinación ni nada parecido, Georg, simplemente experiencia. Nunca recibo un reclamo de Lady Tiernay sin que reciba un mensaje de Lord Kaulitz. Además, vi a su hombre cabalgando más temprano y asumí que él traía un mensaje. Ha habido algunas pequeñas insurrecciones en Normandía, y le pedí a Tom que se ocupase de ellas por mí. Sin duda él está esperándome para hablarme sobre eso”.
“Ah”. Relajándose, el hombre le dio el documento en cuestión.
Gustav abrió el pergamino un poco irritado por tener que explicar todo. Georg solo estaba trabajando en reemplazo de su capellán hacía dos días—su secretario habitual estaba enfermo—pero Gustav ya estaba deseando su pronta recuperación. Su substituto era un hombre muy nervioso y supersticioso, y parecía estar extremamente dispuesto a creer en la reputación Gustav como la semilla del diablo”. Sacudiendo la cabeza, Gustav enfocó su atención en el pergamino que ahora sujetaba. Un momento más tarde, estaba arrugando el pergamino y lanzando el bollo al piso no lejos del primero, y Gustav se puso de pie para empezar a caminar impacientemente delante de su trono.
Como esperaba, Lord Kaulitz había sofocado las pequeñas revueltas en Normandía y estaba en camino a su casa. Pero él también había agregado un reclamo o dos sobre su vecina. Parecía que su vasallo se sentía poderosamente hostilizado por la Lady de Tiernay y estaba asediando al rey con cartas respecto a esa mujer.
En el mensaje el Martillo de Kaulitz respetuosamente solicitaba que el rey hiciese algo respecto a esa mujer… o, él mismo, lo haría.
Sonaba muy parecido a una amenaza, y a Gustav le desagradaba mucho ser amenazado por uno de sus vasallos. De hecho, si Tom no fuese un guerrero tan valioso y no lo hubiese ayudado tan frecuentemente en los últimos diez años, lo habría hecho castigar. Pero, a diferencia de su padre, Tom había sido un hombre muy útil.
El rey hizo una mueca al pensar en el previo Lord de Kaulitz, el padre de Tom. Nacido como segundo hijo, Jörg había esperado tener permiso para unirse a un monasterio y vivir su vida rodeado por los polvorosos escritos papales que tanto adoraba.
Desgraciadamente, su hermano primogénito había muerto, forzándolo a abandonar esos planes a favor de un matrimonio que produjese un heredero. El hombre había descargado todo su resentimiento en su hijo.
Para ser honesto, en opinión de Gustav, Jörg había sido un loco. Afortunadamente, Tom todavía no había demostrado la misma tendencia. Desgraciadamente — para Tom, por lo menos —tampoco había demostrado la ansiedad por aprender lo que su padre había pasado, y ellos dos no se habían llevado nada bien. El odio de Jörg dirigido al muchacho lo había hecho huir de su casa y presentarse al servicio de Gustav cuando había ganado sus espuelas como caballero.
Ah, si la pérdida de Jörg había sido una ganancia para él, Gustav decidió. Pero eso no eximía a Tom de su obligación para respetar a su rey.
“Qué mierda voy a hacer con estos dos?” el rey preguntó a frustración.
“No estoy seguro, su excelencia. Cuál es el problema exactamente?” Georg preguntó tentativamente.
“Me doy cuenta que ambos están reclamando — y por su reacción, diría que bastante frecuentemente— pero, de qué se quejan exactamente?”
Gustav giró para lanzarle una mirada feroz, abriendo la boca para explicarle que su pregunta había sido retórica, cuando cambió de idea.
Por el contrario, él dijo, “Lady Tiernay me escribe para advertirme del comportamiento cruel y abusivo de su vecino hacia sus siervos y los aldeanos, porque ella sabe que yo no deseo ver a ninguno de mis súbditos siendo maltratados”.
“Ah... ” Georg dijo nuevamente, reprimiendo una sonrisa sarcástica ante la imitación del rey de la voz chillona de mujer. “Y Lord Kaulitz, de qué se queja?”
Gustav lanzó una carcajada. “El me escribe diciendo que Lady Tiernay es entrometida, chismosa y una arpía que le hace la vida imposible”.
“Hmmm”. El nuevo capellán se quedó callado por un momento, luego murmuró, “Su excelencia, la esposa de Kaulitz no murió varios años atrás?”
“Si. Diez años atrás. En un parto. Y Tom ha sido mi mejor guerrero desde entonces.
Siempre dispuesto para pelear, siempre en campaña con mis misiones. No sé qué haría sin él”.
“Lady Tiernay no perdió a su marido cuatro o cinco años atrás?”
“Qué?!!” Gustav frunció el ceño brevemente, luego su expresión se relajó. “Oh, no. Ese era su padre. Lady Tiernay nunca se casó. Una negligencia de su padre por no haberse ocupado de eso antes de su morir”.
“Ella está en edad casadera, entonces?”
“Oh, si. Ella ha pasado la edad para casarse, me parece. Ella debe tener…”
Gustav hizo una pausa, calculando mentalmente. “Creo que ella debe tener veinti... y pico de años”. Gimiendo, él apoyó su mano en el trono. “Y hay otro problema. Debería haberla casado hace rato. Cómo carajo pueden esperar que le encuentre un marido a una arpía como ella?” Nuevamente, el rey comenzó a caminar inquietamente.
“Tal vez ya haya encontrado uno, se excelencia”, Georg ofreció con osadía. Cuando el rey lo miró severamente, él encogió los hombros. “Quizás la solución sea hacer que Lord Kaulitz se case con ella. Resolverá ambos problemas de una sola vez. Ella estará casada, y ellos se verán forzados a resolver sus conflictos solos, sin molestar al rey”.
“Ellos se van a matar en menos de una semana!” Gustav predijo con disgusto.
“Quizás”. Georg hizo una pausa ingenuamente. “Pero aún así ambos problemas estarán resueltos, o no?”
Gustav lo contempló con admiración. “Maldición, Georg”, él finalmente jadeó. “Tienes una mente aguda y maliciosa”. él se apresuró a volver a su trono y empezó a hablar excitadamente. “Debes escribir dos mensajes en mi nombre… y llevar adelante este plan!” Entonces se dio vuelta hacia el capellán con una mirada peligrosa en sus ojos. “Y, Georg,” él agregó. “No me falles”.
═─ » Capítulo 1
Nadie se sorprendió cuando pateaste la pelota. Solamente habías hecho una pausa en tu camino a través del patio para observar jugar a los niños cuando la pelota de trapo de repente rodó en dirección tuya, y _____ impulsivamente la pateaste. Fue un error.
Goliath, quien estaba a tu lado como siempre, interpretó eso como una señal de que iban a jugar. El corrió detrás de la pelota en un segundo, ladrando alegremente y corriendo como el viento. Intentaste llamarlo de vuelta, pero tu voz fue fácilmente tapada por los gritos de los niños que empezaron a correr detrás del enorme perro. Goliath alcanzó la pelota primero. Desgraciadamente, él no entendía las reglas del juego y, como animal de caza, no la trajo de vuelta inmediatamente. Por el contrario, la tomó entre sus mandíbulas fuertes y la mordió.
No pudiste oír el material rasgándose, pero supusiste lo que sucedía cuando las plumas de repente llenaron el aire alrededor de la bestia. Satisfecho porque había matado a su presa, Goliath caminó alegremente por al lado de los niños desesperados para soltar la pelota arruinada tus pies. Luego se sentó cómodamente sobre sus patas delanteras lo que consideraste el retrato vivo de la satisfacción. Sacudiendo la cabeza, te curvaste para levantar y examinar el juguete dañado.
“Mi lady?”
Sacaste su atención de la pelota y miraste a las dos mujeres que aparecieron a tu lado. “Si?”
“Esta es Maggie,” Ducky dijo suavemente. Ducky era tu criada, y también una buena amiga. Si ella había traído a esa otra mujer con ella, era porque había algo que las dos necesitaban. Estudiando amablemente a la mujer mayor, decidiste que te gustaba lo que veías.
“Hola, Maggie.” saludaste a la mujer, luego ladeaste tu cabeza ligeramente. “Nos sos de Tiernay.” No era una pregunta. Conocías a todas tu gente; te esforzabas por conocerlos a todos. Esa mujer no era uno de ellos.
“No, mi lady. Vengo de Kaulitz.”
Tus labios se apretaron con la noticia. Eso sólo podía significar problemas. Tus pensamientos fueron distraídos por un murmullo de descontento cuando los niños llegaron y se pusieron alrededor tuyo. Sus pequeños ojos acusadores movieron hacia Goliath y al juguete ahora inservible.
“Voy a arreglar eso”, aseguraste culposamente, aliviándote cuando viste que la promesa parecía satisfacerlos. “Ven”.
La orden era para Goliath, quien inmediatamente se puso de pie para seguirte, mientras te dirigías a la fortaleza, y las mujeres te obedecieron también. Ducky y Maggie prontamente te alcanzaron mientras los niños corrían detrás de ustedes. Cruzaron el patio, subieron los escalones y entraron a la fortaleza de Tiernay.
“Voy a necesitar algunas plumas, Ducky,” anunciaste mientras cruzabas el gran salón.
“Si, mi lady”. La mujer partió rumbo a las cocinas donde el Cocinero había estado pelando gallinas toda la mañana para la comida de la noche.
“Ustedes niños vayan a esperar a la mesa. Voy a hacer que Ducky les traiga algo para beber y dulces mientras esperan.” Diciendo eso, llevaste a Maggie y a Goliath hacia dos sillas que había cerca del fuego. Sentándote en tu lugar habitual, le hiciste señas a la mujer para que tomase el otro lugar, luego comenzaste a revisar en la pequeña cesta buscando tu aguja de costura e hilo. Goliath se acomodó en el piso a tus pies.
Estabas consciente del modo en que la mujer vaciló, luego se sentó incómodamente en el borde de su silla. Acababas de encontrar los dos artículos necesarios cuando Ducky apareció a tu lado con una fuente de madera conteniendo las plumas solicitadas.
“Gracias”. Aceptaste la fuente y sonreiste a la mujer.
“Podrías buscar a alguien para que les traiga a los niños algunos refrescos y dulces mientras ellos esperan?”
“Si, mi lady”.
Colocaste el hilo en la aguja, tu atención enfocada en la tarea mientras le preguntabas a Maggie, “Entonces, sos de Kaulitz?”
“Si”. La mujer aclaró su garganta y se movió incómodamente en su silla.
“Solía estar a cargo de las criadas allá”.
“Solía?” preguntaste. Levantaste la vista al tiempo de notar la amargura que cruzó la cara de la criada.
“Si. Fui echada de allá”, la mujer admitió reticentemente. Un minuto más tarde ella reveló, “El lord sólo quería jóvenes bonitas como criadas para servir en las habitaciones”.
Tu boca se apretó. Esa noticia no te sorprendía. Muy poco podía sorprenderte respecto al comportamiento de Hammer* Kaulitz. (*Hammer en inglés significa martillo). El trabajo y los servicios duros frecuentemente no eran Retribuidos amablemente por ese hombre. Cruel y bastardo, pensaste con irritación, entonces te forzaste a comenzar a remendar el rasgón de la pelota de los niños.
Después de varios puntos te sintiste suficientemente tranquila para preguntar, “Y qué has estado haciendo desde entonces?”
La mujer aclaró su garganta nuevamente. “El granjero White me estuvo cortejado hasta entonces. El era viudo”, ella explicó, ruborizándose como una muchacha adolescente. “Cuando me echaron, nos casamos. Atendí su casa y lo ayudé en la granja.” Su sonrisa y el rubor se debilitaron, dando lugar a la palidez y el cansancio. “El murió dos semanas atrás”.
“Lo siento mucho”, dijiste. Lágrimas saltaron a los ojos de la mujer, Maggie bajó la cabeza, y volviste tu atención a tu tarea.
Abriste la pelota y comenzaste a llenarla con plumas. Casi habías terminado con la tarea cuando Maggie se recuperó lo suficiente como para continuar.
“Supe que habría problemas. Yo no podía administrar la granja sola, por supuesto…”
“El te echó de allí y le dio la granja a otra pareja,” adivinaste.
No era un hecho infrecuente, pero en tu opinión era cruel tratar tan mal a alguien que había trabajado tan duramente y fielmente por tanto tiempo.
Maggie sacudió la cabeza. “Como siempre el envió al pobre joven Stephen para hacer el trabajo sucio.”
Sacudiste la cabeza. Stephen era el segundo en comando de Lord Kaulitz, el hombre dejado a cargo de Kaulitz mientras Hammer estaba afuera. Lo que parecía ser bastante frecuentemente. Lord Kaulitz siempre parecía estar involucrado en una u otra batalla. Pero aunque Stephen era el administrador del Castillo de Kaulitz, ninguna de las decisiones eran suyas. Seguramente Hammer le ordenaba al hombre que hiciera una u otra cosa— ninguna de ellas muy agradable. El joven Stephen sufría horriblemente por ser forzado a ejecutar tales acciones malvadas.
“Hizo que Stephen confiscase todo lo que había en la cabaña en nombre del impuesto”, Maggie continuó, llamando tu atención de vuelta hacia ella. “Entonces ordenó quemar todo eso delante de mí y me echó.”
Tus ojos se agrandaron incrédulamente. Se trataba de un impuesto de morte, un aspecto legal del sistema feudal. Pero confiscar hasta la última posesión, y luego quemar todo… bien, eso era directamente cruel. Deliberadamente cruel. “Stephen hizo eso?”
Maggie hizo una mueca. “Si. Él es un criado fiel. Se disculpó mientras, hacía eso.”
Sacudiste la cabeza solemnemente mientras terminabas de llenar la pelota y te preparabas para coser la parte final. Obviamente el joven Stephen había hecho eso. El cumplía órdenes de su lord.
“Su madre habría llorado al verlo forzado a actuar de ese modo.”
Levantaste la vista interrogativamente ante las palabras de la mujer y Maggie explicó. “Nosotras éramos amigas cuando ella vivía en la aldea. Se le habría roto el corazón.”
“Ella está muerta?” educadamente preguntaste, sabiendo que la criada necesitaba cambiar de tema para mantener la compostura. Pero si hablar sobre la madre de Stephen la ayudaría a poner distancia de sus pérdidas recientes, no veías razón para no complacerla.
“Oh, no. Ella no está muerta. Pero cuando Stephen fue nombrado administrador y fue forzado a ejecutar estos castigos severos… Bien, ella no pudo aguantar ser testigo de eso. Ella dejó la aldea. La mayoría de las personas piensan que ella está muerta, pero yo creo que ella está viviendo en la frontera entre Tiernay y Kaulitz. Stephen frecuentemente cabalga para ese lado y desaparece toda la tarde. Creo que la está visitando”. Ella se silenció por un momento, luego agregó, “El partió con ese rumbo después de quemar mis cosas. Probablemente también fue a visitarla en esa ocasión.”
Observaste la expresión perdida en la cara de la mujer y el modo en que ella se hundía en la silla y suavemente dejiste, “Y entonces viniste a Tiernay.”
“Si”. Maggie se sentó un poco más derecha. “Mi hija se casó con o el cantinero de la aldea diez años atrás.”
Sacudiste la cabeza. Conocías al dueño de la cantina y a su esposa.
“Y ellos se ofrecieron a llevarme con ellos… pero ellos deben tener su permiso primero.”
Te quedaste callada por varios segundos. Eras responsable de las tierras y de toda la gente que vivía en ella, y entonces, como la mujer decía, tu permiso era imperativo antes que cualquiera de los inquilinos pudiesen mudarse. Tu primer instinto era simplemente asentir y decirle a Maggie que era bienvenida en Tiernay. Pero habías notado un tono extraño en la mujer cuando había hablado de la oferta de su hija. No había duda de que Maggie había trabajado toda su vida. Perder su puesto en el Castillo de Kaulitz debía haber sido muy desmoralizante. Su casamiento y posición como esposa del granjero habían salvado un poco de su orgullo, pero ahora estaba reducida a aceptar la caridad de su propia hija. Sospechabas que eso irritaba a la mujer, y ahora, considerando el asunto seriamente, sacudiste la cabeza. “No.”
“No?” Maggie parecía a punto de estallar en lágrimas, y mentalmente te retaste por expresar tus pensamientos en voz alta.
“No habrá caridad para vos, Maggie. Vos todavía sos fuerte y saludable. Puedes trabajar. Y sucede que me está faltando alguien con sus habilidades.”
Maggie perdió su mirada trágica, y la esperanza lentamente llenó su rostro mustio.
“Si. Edwith solía estar a carga de mis criadas aquí. Ella murió un mes atrás y todavía no tengo con quien substituirla. Ducky tiene que ocuparse de ese trabajo mientras también atiende sus propios deberes. Estarías haciéndonos un gran favor si tomase el lugar de Edwith. Le sacaría un gran fardo a Ducky.”
“Oh!” Para tu preocupación, la mujer repentinamente empezó a llorar. Por un momento, temiste haberte equivocado y que Maggie deseaba quedarse con su hija. Entonces la mujer te sonrió entre las lágrimas, y te relajaste.
“Oh, mi lady. Gracias”, la nueva jefa de criadas jadeó, positivamente contenta con la idea de ser útil nuevamente.
“Gracias”, dijiste firmemente, luego le sonreíste a Ducky, quien de repente apareció a tu lado. “Tal vez Ducky podría hacer con vos un recorrido por el castillo y presentarte a las muchachas que estarán bajo tu dirección”.
“Claro”. Ducky le sonrió a la otra mujer, luego te miró de vuelta.
“Boswell dice que hay un grupo aproximándose.”
“Un grupo?” levantaste una ceja interrogativamente, y Ducky sacudió la cabeza asintiendo.
“Si. Ellos llevan el estandarte del rey”.
Hiciste una pausa, luego sonreíste ampliamente. “Bien, bien. Si llegas a ver a mi tía en tu recorrida, cuéntale la noticia.” Con eso, rápidamente diste la última puntada a la pelota, amarraste y cortaste el hilo. Las dos mujeres se marcharon, y llevaste la pelota a la mesa donde sus dueños todavía estaban comiendo y bebiendo.
“Aquí tienen,” dijiste alegremente, colocando la pelota en la mesa. “Como nueva. Apresúrense con la comida, luego vayan afuera a jugar. Es un día demasiado lindo para estar en un lugar cerrado.”
Corriste hacia la puerta de la fortaleza, sacudiendo tu falda mientras te movía.
Los viajantes estaban atravesando los portones del patio cuando saliste a la luz.
Esperaste que Goliath te alcanzase, luego cerraste la puerta detrás del perro y rápidamente alisaste tu cabello. Te sintiste nerviosa.
Ese era un grupo del rey, Ducky había dicho, y podías ver que tu criada tenía razón. El estandarte de Gustav II flotaba a la vista de todos — y tu lo estabas mirando. Había llegado el día. El rey probable estaba respondiendo finalmente a las muchas cartas que le habías mandado respecto a Lord Kaulitz.
Esa era la única explicación para esa visita.
Le hizo bien a tu corazón. Habías comenzado a temer que el rey fuese indiferente al comportamiento frío y hasta cruel de tu vecino. Te habías sentido frustrada e impotente por tu incapacidad para hacer algo más que observar a los siervos y aldeanos de Kaulitz escapando y buscando refugio en Tiernay, y escribir cartas de protesta. Porque, algunas veces hasta habías llegado tan lejos como comprar a las posibles futuras víctimas de Kaulitz y salvarlas de la ira del hombre. Lord Tom, el Hammer de Kaulitz, ciertamente era el diablo con forma humana.
Pero finalmente el rey había enviado a alguien para ocuparse del asunto. Por lo menos, eso asumías, que él había enviado a alguien. Esa compañía de hombres era muy pequeña para contar al rey entre ellos. No. El obviamente había enviado a un hombre en su lugar para atender el asunto, y eso te parecía bien. El caso muy probablemente no fuese de mucha importancia para el rey; pues sólo afectaba a aquellos a quien Hammer abusaba. Comparado con las miserias de todo el reino, ese era un problema menor. De hecho, las personas de Kaulitz eran muy afortunados porque el rey Gustv estaba ocupándose personalmente del asunto.
Ese pensamiento te alegró, esperaste pacientemente hasta que el grupo de hombres alcanzó la parte inferior de los escalones de entrada; entonces fuiste a saludarlos, con Goliath a tu lado.
“Lady Tiernay?” Era el más rubio del grupo quien la saludó. El tenía una expresión esperanzada.
“Si. Viene de parte del rey”. Declaraste lo obvio, y el caballero sacudió la cabeza, una sonrisa se curvó en sus labios mientras tomaba tu mano y se inclinaba para depositar un beso sobre tus nudillos. “Lord Georg, a su disposición.”
“Es bienvenido aquí en Tiernay, Lord Georg,” dijiste formalmente, luego colocaste la mano sobre tu brazo y giraste en dirección a los escalones. “Debe estar hambriento y sediento después del viaje. Permítame darle la bienvenida con comida y bebida”.
Sacudiendo la cabeza, Lord Georg subió los escalones contigo, dando órdenes por encima de su hombro mientras avanzaban. Casi alcanzaban la puerta de la fortaleza cuando el grupo de niños salió. Riendo y gritando en un segundo, y azorados y mudos al siguiente. Viendo a Lord Georg y a ti, el grupo murmuró sus disculpas y bajó los escalones, para lanzarse en una carrera ruidosa una vez que estaban en el patio. Sonreíste e ignoraste la mirada interrogativo que Georg te lanzó.
Haciéndolo entrar, guiaste al hombre del rey hacia la mesa que los niños habían dejado. Lo acomodaste en la silla de la cabecera que tu padre siempre había ocupado, luego te excusaste para hacer un viaje rápido a las cocinas. Volviste minutos más tarde con un grupo de criados siguiéndote, trayendo la mejor comida y el mejor vino disponible en la Fortaleza Tiernay, en tus más bellas bandejas de plata. Después que nerviosamente supervisaste el servicio de Lord Georg, te acomodó al lado de él y sorbiste calladamente de un jarro con aguamiel mientras él comía. Estabas impaciente por confirmar el propósito de su visita, pero sabías que sería rudo hacer eso antes que él satisficiese su hambre y su sed.
Afortunadamente para tu estado de ánimo, Georg no era un hombre de perder tiempo saboreando la comida. El devoró una cantidad asombrosa de comida —y aún más de vino — en un instante, luego se sentó hacia atrás con un suspiro satisfecho y sonrió.
“Debo elogiar su buena mesa, mi lady”.
“Gracias, mi lord”, murmuraste, preguntándote como sacar el tema del propósito de su viaje. Georg pronto puso fin a esa preocupación sacando un rollo de papel de entre sus ropajes voluminosos.
“Le traigo noticias del rey”. él colocó el pergamino delante tuyo, luego aguardó a que lo leyeses.
Con manos de repente temblorosas, rompiste el sello y rápidamente desenrollaste el pergamino, tu mente febrilmente evaluando las posibilidades de como el rey tenía intención de castigar tu vecino por el tratamiento rudo que le daba a las personas.
Designar a alguien para vigilarlo? Imponerle una multa? Castigarlo?
“Casarme con él? ” Las palabras parecieron gritar desde el pergamino mientras leías su contenido.
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EL INTERDADO... 180º
Quiza no deba meter a dios en esto. Sobre todo porque ya nisquiera pienso en el.
Algo alumbra mi cabeza. Una especie de bombilla se ilumina y la idea llega a mi, justo antes de que georg comienze a caminar en mi direccion. Di la vuelta y hago lo que hago sin pensar.
-que mier…- se queda callado en cuento me ve-
-soy yo –aun asi hago la estupidez de confirmar que soy yo quien entro. Como si no se hubiera dado cuenta antes. Que idiota me vuelve georg listing a tan solo segundos de “verlo”-
-asi que esta es una de tus fantasias locas?
Dorian me pregunta aun estando en boxers. El probador era muy angosto asi que no era necesario que hiciera un gran esfuerzo para juntar nuestros cuerpos. Solo le basto con dar un par de pasos y tomarme de la cintura para después besarme el cuello.
Mi interior temblaba y no precisamente por las manos de Dorian llegando a mis muslos subiendome el vestido. Mis oidos se agudizaban para comprender el aleman que estaban hablando justo fuera de nosotros. Solo una puerta separaba a georg de ver a Dorian casi comerme viva. Pero eso no importaba, lo realmente importante es que el estaba aquí después de tres meses y un poco mas.
De pronto Dorian se detiene. Algo lo distrae.
-espera…no estas aquí por que fuese tu fantasia
-lo miro con cara de “¿Por qué dices eso?-
-de quien huyes?
Intenta abrir la puerta y lo detengo de un manotazo. El se queja algo fuerte por el dolor.
-todo bien señor Barnes? –escuchamos fuera a un hombre, que pregunta mas con curiosidad que con preocupación-
-si, si …aauuuu! –susurra- que te pasa!, salvaje!
-no abras, de acuerdo?
-por que no?
-por que no y punto!, mejor vistete y dejemos esto para después
-¿me estas dando ordenes?, o es solo mi imaginación tn –pone su mano sobre la majila de la puerta- saldre a ver
-asi?, dejaras que te vean en interior solo por que eres un chismoso que no aguanta nada?
Dirige su vista hacia abajo persiviendo la realidad . Seguro no saldra en calsones. Asu que toma su ru ropa y comienza a ponersela de mala gana. Al final tuve que arreglarle el cabello.
Tomo su muñeca y miro el reloj que trae en ella. Las 5:30 pm, hemos estado aquí dos horas y media. No se cuanto tiempo llevamos en el probador, pero espero que sea el sufieciente para no encontrarmelo.
-salgamos –me extiende la mano y yo la tomo- aunque estoy seguro que todos nos miraran extraño
Respiro profundamente y salimos del probador. Miro alrededor de forma disimulada y no ha nadie. Bueno, si hay gente pero me refiero a el.
-¿buscas a alguien? –pregunta mirandome fijamente. Me examinaba con la mirada-
-muevo la cabeza negando sus sospechas- nop
-señor listing, ¿Qué le ha parecido los ajustes?
Ese apellido hizo voltear la mirada a Dorian, yo solo cerre los ojos como instinto de proteccion o de fracaso x mi intento vergonzoso de salir sin que nada de esto hubiese pasado.
-asi que es por el? –ahora tengo su mirada molesta-
-solo vámonos, por favor –intento jalarlo hacia la caja de pagos-
-por que?, hace mucho que no lo ves, creo que un encuentro de hermanos estaria perfecto
- y que tal un reencuentro de mejores amigos? –lo digo en el mismo tono agrio que el-
Por primera vez me regala una mirada asesina. Doy gracias a dios que no esta cerca ninguno de los matones que seguro deben trabajar para el, si no ya no lo estaria contando.
Suelta mi mano y caminamos a la caja de pagos, el extiende un cheque por 10 mil dolares a la chica y nos vamos del lugar. Sin palabras, ni lios, solo respiraciones incomodas y molestas hasta llegar a casa.
-te vere mañana a las 7, pasare por ti a tu habitación y bajaremos juntos
-lo lamento, no quise ofenderte –digo antes de que suba un escalon. El se detiene y vuelve la mirada hacia mi-
-mañana a las 7 tn
Y me quedo como una semejante y reverenda estupida de pie, esperando que el techo se me callera encima. Pero nada de eso paso en 20 minutos que el tiempo se me detuvo. Ya en mi cama comenze a pensar…numero 1.- no tuve porque esconderme d georg listing, después de todo el no me debe nada y yo tampoco a el. 2.- no tuve porque disculparme con Dorian, si tomo en cuenta que el empezo esto y 3.- no tengo porque acompañarlo a algo que estoy segura que no disfrutare…estoy decidida no hare nada de lo que no quiera. No ire a esa maldita celebración donde no conosco a nadie.
…
Este maldito sol me esta acabando. Si sigo un minuto mas asi seguro me saldran pecas en la cara y parecere al hermano menor de william, ese principe borracho. Miro de reojo a tn que esta colgada de mi braso mirando el nombramiento, parece que no le molesta en lo mas minimo. Claro, ella tiene ese sombrero que le cubre de este Apocalipsis de calor. Necesito un trago, algo fuerte.
-disculpa la tardansa, pero tuvimos un inconveniente –me susurra matt al ponerse a mi lado y acomodarse el traje azul marino-
-no seas imbesil. Aquí no –digo entre dientes. Por fin tn me mira, después de ignorarme olímpicamente toda la mañana.-
Los cañones se hacen sonar, eso significaba que esta faramalla absurda habia terminado y que podia correr a hacer mi vida lejos de esta mierda de sociedad. Pero mi madre toma el otro braso que tenia disponible y pide a tn que me deje libre por un instante. Ella acepta con una sonrisa y matt aprovecha para presentarse.
Nos alejamos una dstancia razonable y mi madre comienza a hablar y hablar y hablar. Que si william quiere verme, que si kate su esposa debe conocerme.
. Que si carlos hace mucho tiempo que no me veia. En fin, nada de importancia, lo que ahora contaba era leer los labios de matt, para saber exactamente como se dirigia a tn.
Me sorprendio la habilidad que tiene esa sanguijuela para hacer reir a las mujeres, porque tn no ha sido la primera que le arranca una sonrisa a pesar de lo molestas que puedan lucir o lo difíciles que aparenten ser. Por la cama de ese bueno para nada han pasado mujeres hermosas y de renombre, como por ejemplo la misma kate y digamos que tambien paso por mi cama. Aunque debo confesar que no me gustan las mujeres mayores.
-madre, madre…ok entendi, hablare con tn y si ella se siente bien comeremos cn ellos, de lo contrario llevare a mi novia a casa
-de acuerdo, hijo
Beso su mejilla y camino en direccion a tn, saludo a varios duques que pasan a mi lado o fente a mi y que aun me recuerdan. al final doy gracias de estar frente a ellos.
-por favor, diga lo que diga mi madre solo di que te sientes fatal
-ella se encoje de hombros-
-asi que odette quiere que nos quedemos no? –pregunta matt-
-asiento con la cabeza tomando a tn del braso- vamos
Inventamos la supuesta enfermedad de tn y salimos de ese lugar. Pero ella tenia otros planes, no queria estar conmigo.
-ire a dar una vuelta, nos veremos en casa
-yo te llevo –insisto-
-no, mejor los dejo solos para que hablen de negocios –finje una sonrisa- fue un placer conocerte matt
-el le devuelve una sonrisa- el placer fue mio mi lady
Sin mas camina y yo subo al auto dejando de dar importancia. Habia cosas que limpiar y cubrir como para preocuparme por ella ahora. Si esta encaprichada es su problema hormonal, no mio. Ahora agradezco no haber sido mujer.
…
-te puedo ayudar? –le ofresco mi pañuelo a una chica que vi llorando desconsoladamente hacia minutos. Pero que apenas me atrevi a acercarme a ella-
-ella alza la mirada y me observa. Se limpia las lagrimas, seguro no queria que la viera llorar- gracias, pero estoy bien
-mi mano sigue extendida ofreciendo el pañuelo- estas llorando, te he visto desde hace minutos y no pude evitar venir, siento si te incomode
-ella respira profundo y toma el pañuelo. Seca las pocas lagrimas que aun salian sin querer.- gracias, muy poca gente es atenta aquí
-sucede que no soy inglesa –comento sonriendo. Ella hace lo mismo-
-ni yo
Me da confianza de sentarme a su lado. Mirando hacia la fuente. Hacia una hora mas o menos que caminaba en este parque. Pero ella llamo mi atención y como no vi en todo este tiempo que alguien se le acercara, deduje correctamente que estaba sola.
-debe ser muy duro estar en este pais sola –digo. Quiza asi me explique la razon de su llanto-
-asiente- me imagino, pero no estoy sola
-¿perdiste a alguien?
-mueve su cabeza de forma negativa- quiero hacerlo, pero no puedo
-entonces no lo hagas
-me mira fijamente- tu que harias, si tu amas a alguien tanto que no quieres que nadie lo dañe…sobre todo si tu eres la que le haras daño
-me pongo a pensar, esto es confuso y difícil, como dañar a alguien que amas?- pues…procuraria con todo mi ser no dañarlo
-incluso si intento la verdad siempre sale a la luz, mi pasado es…tormentoso
-mira, no te conosco pero pude sentir que eres una gran chica, eres amable, atenta y educada –ella me mira incredula- lo digo porque no fuiste tan grosera como para no aceptar el pañuelo de una desconocida y no me dijiste que no me metiera en tus asuntos cuando te hize la platica-explico-…ahora ves como tu pasado no me afecta, asi que si ese pasado sigue donde esta entonces no dañara a ese alguien
-eso es engañar
-muevo la cabeza negando- alguien me enseño en este tiempo que llevo viviendo a su lado, que eso se consideraria como omitir información…y una cosa mas, ese sabio hombre me dijo “lo que no fue en tu año, no fue en tu daño”, asi que el no tiene que reprocharte nada que no vivio a tu lado
La rubia me sonrie. Siento su gratificación en la mirada aunque no me la diga abiertamente. Este dia aunque pense que seria una mierda resulto que fue bueno. Después de todo hoy ayude a alguien!...aunque eso no salvara mi alma de ir al infierno.
-eres muy inteligente y tienes razon…seguire con el, muchas gracias –se pone de pie-
-yo hago lo mismo- no agradescas, considera esto como el apoyo de dos extangeras en un lugar extraño
-de todos modos gracias –me entrega el pañuelo-
-no lo acepto- quedatelo
-no, es muy fino
-va! Pañuelos van panuelos vienen –le sonrio- quedatelo
-entonces sera un grato recuerdo de quien salvo mi relacion
La chica me abrasa. Vale que esto se estaba tornando algo mas que un encuentro de extrañas…pero se sentia bien.
…
Me encontraba en casa de los dekay, los padres de Matt. Ellos nos vieron salir de su casa con la maleta llena de metanfetaminas y pensaron que su hijo se mudaria. Lógicamente no diriamos lo que en realidad traiamos dentro. Asi que nos acatamos al nuevo giro del plan. Ahora el muy estupido de matt dekay vivira en mi casa. No se porque pero estoy a dos segundo de irme a entregat a la policia, confesar lo que tengo en la maleta y asi librarme de el.
-que la pasaremos genial hermano!, no te pongas asi
-solo guarda silencio animal, no se como le explicare a tn de tu presencia, si se supone que no llevo el trabajo a casa
-te oyes como si tuvieras algo serio con ella y no es asi, ademas ella esta interesada en el Negocio y debe empaparse de conocimiento
-no te atrevas a tocarla dekay, ella no es como las demas
-uuuuu! Tranquilo hermano, no sabia que te encendia que hablara asi de las putas
-ella aun no lo es…asi que hasta que no de ese paso te prohibo tocarla, después ella sabra si te mete en su cama o prefiere ahorrarse el asco de hacerlo
El rie frenéticamente y yo me tranquilizo. Se que le quedo claro que no debe tocarla. En todo caso solo lo hare yo.
Llegamos a casa y le mostre la habitación de huéspedes. El se quedo a instalarse y yo subi a buscarla. Supuse que estaba en el gimnacio donde las ultimas semanas se la pasa media tarde ejercitandosey haciendo terapia en su muñeca que aun no queda del todo bien desde del accidente de caballo, pero que nadie nota porque ella se empeña en ocultarlo bien.
Me gusta que sea una mujer con carácter, con fuerza de voluntad…que sea asi, como es. Su pinta de niña inocente que esconde a una chica sensual.
-no me equivoque –le digo al verla montada en la bici de sppining- sabia que estarias aquí
-no me digas?, sera porque siempre estoy a esta hora aquí?-la ironia empapaba su voz-
-ok, sigues enojada conmigo –levanto las manos a señal de derrota- disculpame, fui un patan estupido
-lo dijiste tu, no yo –seguia ejercitandose en ese short negro demaciado corto y esa blusita de tirantes, tan delgada que seria mejor que no tajese nada- me voy a acercar a ti, pero no quiero que me recibas con un golpe…quiero hacer…-me dedica una mirada con las cejas enarcadas-quiero hacer las paces contigo, linda
-mira Dorian, no se que pudiste pensar el dia que vimos a georg –para sus piernas y seca el seudor de su frente, pasando después entre sus senos que tambien tenian ligeras gotas de sudor- pero fue desagradable lo que dijiste, el y yo no necesitamos vernos…no hasta la boda
-asiento con la cabeza- lo entiendo, se que no quieres verlo…¿aun lo amas, cierto?
-se baja de la bici. Toma la botella y bebe el poco de agua que quedaba- te mentiria si digo que no, pero eso que importa ya, cada quien tiene su vida y la vive como puede
-si el dejara a la top model esa y regresara por ti, ¿te irias con el?
-que es esto?, ¿Por qué de pronto tan intrigado por mi asunto con el?
-simple curiosidad cariño –la tomo de la cintura en cuanto la tengo de frente- quiero saber si dejariamos de hacer el amor, porque es la unica cosa que disfruto en este mundo … y que por cierto, no hemos hecho hoy
-sonrie- animo Dorian, que no dejaremos de hacer el amor …pero hoy no, tengo mucha flojera y prefiero algo nuevo -acerca sus labios a los mios, recargandolos ligeramente- ¿acaso no te aburres de estar cn la misma persona todas las noches?
-jamas
-en eso somos muy diferentes –me da un beso fugaz y sale del gimnacio-
¿acaba de decir que se aburrio de follar conmigo?...habria que ser idota para no entenderla.
-puta madre! –digo molesto-
-aquí estas! –la voz de matt me distrae de mis rabietas- acabo de ver a tn y me dijo que te encontrara aquí
-¿y ahora, que?
-hay una situación, tenemos que irnos ya!
-no, esta vez arreglalo tu... no quiero mas pedos
-es que no se puede, te necesitan a ti
-¿Qué pasa matt, por que tanto misterio?
-la policia asecino a nuestro distribuidor colmbiano, y los pocos que pudieron escapar estan chantajeandonos
-que mierda! –grito furioso-
-quieren que les demos medio millon de euros para que no hablen
-y esos hijos de puta creen que cago billites!!!
-o es eso…o los eliminamos esta noche –se encoje de hombros-
-deja que se encargue de eso Federico, que para eso le pagamos a el y sus hombres
-no entiendes, el no quiere meterse en esto xk la policia les esta vigilando o los eliminamos nosotros o estaran jodiendo de por vida
-llama a roy y Frank, diles que nos veremos en 15 minutos en el centro, que lleven sus armas y que nos quebraremos a unos cuantos colombianos esta noche
-vaya! Diversión!
Esa parte loca de matt dekay lo hizo convertirse en mi mano derecha, no tiene miedo de eliminar a quien le estorba y tampoco tiene dificultad para ello. Creo que por eso y por mas cosas es mi mejor amigo.
-investigue un poco a tn –comenta cargando su arma mientras yo conducia-
-le miro-
-que?...tenia que hacerlo, dado que tu estas encantado con esas curvas y hermosos ojos
-te dije que la conosco mejor de lo que piensas
-entonces debes saber que sus padres son mafiosos rusos, ¿no?
Me quede en silencio, nunca habia imaginado lo que me estaba revelando el en ese momento.
-como dices?
-mejor dicho, eran mafiosos rusos…con razon la chica debe tener ese genetica del mal que sus padres le heredaron
-estas completamente seguro de lo que dices?
-se te olvida que fui entrenado por la CIA?
-rio- vaya, entonces no son embajadores de la onu
-sigues hablando coo si estuvieran vivos hermano, ellos murieron hace ya 7 años
Quize seguir con el tema de conversación, pero un auto frente a nosotros que conocia muy bien prendio sus luces traceras tres veces. Eso era la señal que este era el lugar donde los infelices se escondian. Respire profundamente porque aun me daba escalofrios matar a alguien.
-debes aprender a superar esto Dorian, y deja de temblar o me dispararas a mi –me dice matt antes de bajar del auto-
El frio mental de la pistola atravezaba los guantes de piel negros que tenia. Era hora. No habia lugar para remordimientos o arrepentimientos. Este no era un mundo para los debiles o maricas. Este era mi mundo.
martes, 9 de agosto de 2011
Les gustaría la adaptación de una nove??? (Seria de Tom)
Hola chicas bueno esta entrada es para ver si les gustaría que subiera la adaptación de una novela que ame!!! es algo así al estilo de cithy (creo que por eso la ame jaja)es romántica, tiene cosas muy explicitas de ya saben que jajaja y sobre todo humor, la verdad ami me encanto pero me gustaría saber si les gustaría que la subiera al blog, claro no es mía y se adaptaría cambiando el nombre de los personaje =) para hacerla mas estilo al blog, aun que los personajes solo tendrían los nombres de los chicos pero no sus vidas, en fin espero comenten y digan si les parecería que la subiera, la subiría diario y una que otra ves si hay muchos comentarios hasta doble capitulo, pero bueno aquí les dejo de lo que se trata (adaptado) y comenten si les gustaría que la subiera o nop, y si la quieren adaptada o como es en realidad. Espero les guste como a mi =) y si aceptan eso de novelas adaptadas tal ves podría subir otras =) bueno se cuidan y comenten aquí y si no pueden por facebook =) por cierto tambien hay seria publicada como nota =)
UNA PELEA DE VECINOS QUE ADQUIERE PROPORCIONES REALES...
En 1173, Lady (tu)______ Tiernay asedia al Rey Gustav con cartas, exigiendo que haga algo respecto a Lord Kaulitz, quien está maltratando a la gente de la propiedad vecina a la suya.
Lord Kaulitz, por su parte envía una serie de misivas al rey, pidiéndole que haga algo respecto a su peleadora y rezongona vecina, que no hace otra cosa que bombardearlo con misivas amenazantes.
LA SOLUCION IDEAL????
El Rey Gustav halla una solución simple para ambos problemas. Decreta que lady Tiernay debe casarse con Lord Kaulitz, de manera que ella pueda hacer sus reclamos directamente a su marido y que él le pueda responder a sus quejas sin crear más problemas a la Corona. Pero ni lord ni la lady están contentos con la orden del rey.
RESISTIR EL MATRIMONIO A CUALQUIER PRECIO...
A pesar de las ingeniosas tretas de lady ______ para hacer desistir a su vecino de este casamiento, los enemigos declarados pronto descubrirán que ellos tienen mucho en común. Desgraciadamente, al mismo tiempo que Lord Kaulitz descubre que su esposa realmente posee un desopilante sentido del humor e inteligencia combinada con belleza, también descubre que un complot que podría causar la muerte de ambos. Los lectores hallarán muchos motivos para reírse con esta novela, y sin duda, se hallarán deseando que esta pareja despareja encuentre la Felicidad en medio de sus aventuras románticas y peligrosas.
¿Que piensan?
UNA PELEA DE VECINOS QUE ADQUIERE PROPORCIONES REALES...
En 1173, Lady (tu)______ Tiernay asedia al Rey Gustav con cartas, exigiendo que haga algo respecto a Lord Kaulitz, quien está maltratando a la gente de la propiedad vecina a la suya.
Lord Kaulitz, por su parte envía una serie de misivas al rey, pidiéndole que haga algo respecto a su peleadora y rezongona vecina, que no hace otra cosa que bombardearlo con misivas amenazantes.
LA SOLUCION IDEAL????
El Rey Gustav halla una solución simple para ambos problemas. Decreta que lady Tiernay debe casarse con Lord Kaulitz, de manera que ella pueda hacer sus reclamos directamente a su marido y que él le pueda responder a sus quejas sin crear más problemas a la Corona. Pero ni lord ni la lady están contentos con la orden del rey.
RESISTIR EL MATRIMONIO A CUALQUIER PRECIO...
A pesar de las ingeniosas tretas de lady ______ para hacer desistir a su vecino de este casamiento, los enemigos declarados pronto descubrirán que ellos tienen mucho en común. Desgraciadamente, al mismo tiempo que Lord Kaulitz descubre que su esposa realmente posee un desopilante sentido del humor e inteligencia combinada con belleza, también descubre que un complot que podría causar la muerte de ambos. Los lectores hallarán muchos motivos para reírse con esta novela, y sin duda, se hallarán deseando que esta pareja despareja encuentre la Felicidad en medio de sus aventuras románticas y peligrosas.
¿Que piensan?
el internado...de nuevo en londres!
Por instinto me pongo de pie tambien. Me disculpo con la pareja y salgo tras el. Corro hasta detenerlo antes de que salga al jardin.
-te molesto lo que dije?, ¿Por qué sales asi?
-toma mi mano- dejame solo un momento si?
-pero, pero
-no me molesto nada de ti –se acerca y besa mi frente- es mi padre el que arruina todo
-estamos juntos en esto, recuerdalo –beso su mejilla-
…
¿Qué diablos te ocurre Dorian?... ella lo hizo. Cayo la boca de tu padre sin miedo. Es menos marica que tu?
-ehy! Dorian! –matt interrumpe la platica cn mi yo interno-
-disculpa
-no estas aquí!
-que me decias?
-no dime que ocurre hermano!
-mis padres volvieron a jusgarme
-y que dijo el jefe de estado?
-que me va a dar un puesto en el gobierno, que idiota!
-no descartes la posibilidad amigo, necesitamos proteccion de tu ya sabes quien
-dije que no matt!
-ok... tu me estabas diciendo que ya tienes el remplazo de Vanesa –comenta molesto-
-asi es, todavía no es un hecho…pero algo me dice que aceptara
-avisame antes, asi no hago casting a una docena de chicas
-no nos hagamos idiotas que esas mujeres parecen callejeras, nuestros clientes para ver eso no tendrian que pagar miles de dolares, solo tendrian que ir a una esquina
-pues mas te vale que la chica valga la pena por que “el ruso” se esta impacientando
-pues enviale a natasha
-el quiere algo nuevo
-pues temo decirte que no sera el cliente de tn –digo con firmeza. No dejare que ese sucio millonario lastime a tn con sus malditos fetiches.-
-¿Cómo?, ¿tn?
-asiento-
-vaya, vaya, vaya…si no la puedes matar fisicamente, matala por dentro! ,eso si es malvado Dorian
-piensa lo que quieras, pero yo eligire a los clientes de tn
-esto no se maneja asi y tu lo sabes, hay altos mandos…ellos deciden si vale o no la pena, ¿o ya te acostaste con ella?
-un par de veces...todos los dias
-uuuuu!!, que aguante!, entonces yo personalmente le dare la bienvenida
Tomamos lo que restaba de nuestro wisky. No me gustaba referirme vulgarmente hacia las mujeres como a Matt, asi que dejamos ese tema a un lado.
Ya de camino a casa, después de varias horas de meditacion masculina. Decidi darle la oportunidad a tn de ser …prostituta. Al fin de cuentas ya esta grande y sabe lo que hace. No necesita alguien que la este celando y cuidando. Yo no sere como su segundo “moritz”. Aunque se que le purgara la idea que ella este conmigo. Me pregunto que dira ahora mismo. Y sera aun mejor ver su cara cuando sepa que tn ha sido mia.
Llego a casa y esta tn con mis padres en la estancia. Tomando ¿te?...si, es te… saludo de nuevo y me siento a lado de mi supuesta novia. Ella sonrie aliviada de verme.
-¿termino el interrogatorio?, ¿paso la prueba? –pregunto interrumpiendo a mi padre- no te preocupes, tiene todas sus vacunas
Ella rie y yo tambien. Los unicos ofendidos eran ellos.
-me perdi de algo? –pregunto dirigiendome a mi madre-
-en realidad no amor, estabamos conversando con tn a cerca de los listing
-¿de verdad? – la miro fingiendo asombro-
-ella se sonroja y asiente cn la cabeza- les platique que conoci a Moritz en el internado
-yo rio al escucharla nombrarlo de esa forma. Quiza aprendio a odiarlo como yo- vaya, y por que sacamos ese interesantisimo tema de conversación?, ¿a caso ya no hay fraudes en el gobiernos o politicos corruptos? –miro a mi padre- o ya no acostumbras presumir que eres intimo amigo del principe carlos
-no es presuncion y ya que sacamos el tema, no te vi la semana pasada en la cena que ofrecio por el cumpleaños de su esposa la duqueza
-disculpa padre, creo que no tenia ganas de ir a los 100 años de la que siempre fue su amante, ahora ya le llama esposa?
-dorian gregor Barnes – exagera el tono de voz mi madre. Es tan divertido esto- no te refieras asi de ella
-lo siento, soy fan de lady diana –rio-
-mi madre mueve la cebeza lamentando mi actitud…que es un poco infantil debo reconocer.- si ella te escuchara
-disculpa mama –mi madre no parece responder. tn me mira con diversión. – para compensar iremos mañana a el decimo cuarto nombramiento de william …ahora de que lo nombraran?, cocinero real?
-tn no aguanta y me regala una sonrisa.- algo escuche de eso en los noticieros –comenta ella aguantando la risa- según parece se graduara con honores como piloto de guerra, nada escuche sobre cocina
-bueno, es que muy en el fondo el sabe que debe aprender a hacer papilla para cuando la reina se quede sin dientes
-basta Dorian! –mi madre habla- creo que ya te burlaste suficiente, si no quieres ir solo dilo
-nada de eso madre, mañana por la mañana iremos…por que es por eso que estan aquí
-asi es Dorian –mi padre hace mas grave su tono de voz. Lo habia logrado, estaba furioso-
-perfecto, entonces si me permiten ire con mi novia al jardin, estan en su casa
Tomo a tn de la mano y la condusco hacia la salida de la casa. Pero no seria alli donde iriamos exactamente.
-la ayudo a subir a mi auto deportivo. Esta vez no queria chofer- vamos de compras
-¿de compras?
No le respondo hasta que estoy dentro y arranco el auto.
-asi es, tenemos que ir de etiqueta, ademas de comprarte un lindo tocado o sombrero
-no lo se, algo me dice que no iras en buen plan
-y quien si?, nadie que odie a la monarquia va a sonreirle a la reina
- eres un extremista y eso me da miedo…mas que tu verdadera profesion –me dice mirando fijamente el camino-
-vaya, mi verdadera profesion no te da miedo eh?
-No, simplemente eres un…un..-me mira- ¿Cómo lo defines?
-hombre de negocios
-rie- que gracioso, hombre de negocios ah?...entonces eso sera,… ¿y yo?
-tu seras… no lo se, como se le dice finamente a esto, mujer de la vida galante?, chica con la moral distraida?, amm…mariposa de la noche?
-ella me regala una sonrisa- dejemoslo en puta, creo que suena menos hipocrita
-prefiero decir que eres acompañante
-como quieras –se encoje de hombros-
-dime por que?
-me mira- ¿Por qué, que?
-la verdadera razon por la que quieres esto
-no lo se y prefiero seguir sin saberlo, solo quiero y punto
-tiene que haber una razon
-dime la tuya, por que eres lo que eres?
-por que lo soy y punto
No pretendo desenterrar mis fantasmas solo por que unos ojos bonitos, rostro encantador y una chica que da buenos acostones me lo pide. Aun no estoy tan imbesil como para perder la cabeza de ese modo.
-alli esta, nos parecemos demaciado
En eso tenia mucha razon, nos parecemos mas de lo debido. No caere en la cursileria de shekeaspeare diciendo que somos almas gemelas porque a estas alturas de la vida nadie que este en su sano jucio cree en esas patrañas. Pero reconocere que ambos hemos pasado cosas que nos hacen pensar del mismo modo y sentir la la misma manera. Y sanar las heridas con la misma medicina.
…
Caminamos hasta la tienda exclusiva de Carsten Schafer , un nuevo diseñador de modas aleman que se estaba abriendo paso en este mundo. Me llamo la atención un hermoso vestido y un tocado divino.
Pasamos y ambos elegimos lo adecuado para nosotros. Pero yo a diferencia de Dorian tenia exactamente en mente lo que queria. El se la paso probandose trajes hasta que se decidio.
Mientras lo miraba verse al espejo me preguntaba como es que habia terminado en esto. No parece de los que hace ese tipo de cosas. No es vulgar y nunca ha faltado el respeto a nadie. Nisiquiera a su padre que bien se lo puede merecer.
Creo mas bien que es un niño asustado atrapado en un cuerpo de un hombre de 25 , jugando al gangster. Sea como sea el me ayuda y me ayudaria.
-¿Y? -me mira a tarves del espejo.-
-si, me gusta
-de acuerdo, entonces me lo llevare
Entra al probador a cambiarse. Yo comenzo me pongo de pie y caminoa hacia la seccion de catalogos. Tomo uno y lo hojeo. Estaba lleno de smokings para bodas.
-¿Cómo alguien tan hermoso es tan idiota para casarse? –pregunto mentalmente al ver a un guapo modelo-
Segui hojeando hasta que reconoci su voz. Voltee discretamente a todos lados para confirmar que quiza alucinaba. Pero no era asi.
A unos metros de distancia estaba el. Con su cabello largo, una sudadera gris, jeans negros y lentes de sol.
No sabia donde esconderme. Lo primero que vi fue el catalogo y juro que queria caber entera y meterme alli.
-mierda,mierda, mierda! –susurro mientras pienso que hacer- piensa tn!...x el amor de dios!
Quiza no deba meter a dios en esto. Sobre todo porque ya nisquiera pienso en el.
Algo alumbra mi cabeza. Una especie de bombilla se ilumina y la idea llega a mi, justo antes de que georg comienze a caminar en mi direccion. Di la vuelta y hago lo que hago sin pensar.
-te molesto lo que dije?, ¿Por qué sales asi?
-toma mi mano- dejame solo un momento si?
-pero, pero
-no me molesto nada de ti –se acerca y besa mi frente- es mi padre el que arruina todo
-estamos juntos en esto, recuerdalo –beso su mejilla-
…
¿Qué diablos te ocurre Dorian?... ella lo hizo. Cayo la boca de tu padre sin miedo. Es menos marica que tu?
-ehy! Dorian! –matt interrumpe la platica cn mi yo interno-
-disculpa
-no estas aquí!
-que me decias?
-no dime que ocurre hermano!
-mis padres volvieron a jusgarme
-y que dijo el jefe de estado?
-que me va a dar un puesto en el gobierno, que idiota!
-no descartes la posibilidad amigo, necesitamos proteccion de tu ya sabes quien
-dije que no matt!
-ok... tu me estabas diciendo que ya tienes el remplazo de Vanesa –comenta molesto-
-asi es, todavía no es un hecho…pero algo me dice que aceptara
-avisame antes, asi no hago casting a una docena de chicas
-no nos hagamos idiotas que esas mujeres parecen callejeras, nuestros clientes para ver eso no tendrian que pagar miles de dolares, solo tendrian que ir a una esquina
-pues mas te vale que la chica valga la pena por que “el ruso” se esta impacientando
-pues enviale a natasha
-el quiere algo nuevo
-pues temo decirte que no sera el cliente de tn –digo con firmeza. No dejare que ese sucio millonario lastime a tn con sus malditos fetiches.-
-¿Cómo?, ¿tn?
-asiento-
-vaya, vaya, vaya…si no la puedes matar fisicamente, matala por dentro! ,eso si es malvado Dorian
-piensa lo que quieras, pero yo eligire a los clientes de tn
-esto no se maneja asi y tu lo sabes, hay altos mandos…ellos deciden si vale o no la pena, ¿o ya te acostaste con ella?
-un par de veces...todos los dias
-uuuuu!!, que aguante!, entonces yo personalmente le dare la bienvenida
Tomamos lo que restaba de nuestro wisky. No me gustaba referirme vulgarmente hacia las mujeres como a Matt, asi que dejamos ese tema a un lado.
Ya de camino a casa, después de varias horas de meditacion masculina. Decidi darle la oportunidad a tn de ser …prostituta. Al fin de cuentas ya esta grande y sabe lo que hace. No necesita alguien que la este celando y cuidando. Yo no sere como su segundo “moritz”. Aunque se que le purgara la idea que ella este conmigo. Me pregunto que dira ahora mismo. Y sera aun mejor ver su cara cuando sepa que tn ha sido mia.
Llego a casa y esta tn con mis padres en la estancia. Tomando ¿te?...si, es te… saludo de nuevo y me siento a lado de mi supuesta novia. Ella sonrie aliviada de verme.
-¿termino el interrogatorio?, ¿paso la prueba? –pregunto interrumpiendo a mi padre- no te preocupes, tiene todas sus vacunas
Ella rie y yo tambien. Los unicos ofendidos eran ellos.
-me perdi de algo? –pregunto dirigiendome a mi madre-
-en realidad no amor, estabamos conversando con tn a cerca de los listing
-¿de verdad? – la miro fingiendo asombro-
-ella se sonroja y asiente cn la cabeza- les platique que conoci a Moritz en el internado
-yo rio al escucharla nombrarlo de esa forma. Quiza aprendio a odiarlo como yo- vaya, y por que sacamos ese interesantisimo tema de conversación?, ¿a caso ya no hay fraudes en el gobiernos o politicos corruptos? –miro a mi padre- o ya no acostumbras presumir que eres intimo amigo del principe carlos
-no es presuncion y ya que sacamos el tema, no te vi la semana pasada en la cena que ofrecio por el cumpleaños de su esposa la duqueza
-disculpa padre, creo que no tenia ganas de ir a los 100 años de la que siempre fue su amante, ahora ya le llama esposa?
-dorian gregor Barnes – exagera el tono de voz mi madre. Es tan divertido esto- no te refieras asi de ella
-lo siento, soy fan de lady diana –rio-
-mi madre mueve la cebeza lamentando mi actitud…que es un poco infantil debo reconocer.- si ella te escuchara
-disculpa mama –mi madre no parece responder. tn me mira con diversión. – para compensar iremos mañana a el decimo cuarto nombramiento de william …ahora de que lo nombraran?, cocinero real?
-tn no aguanta y me regala una sonrisa.- algo escuche de eso en los noticieros –comenta ella aguantando la risa- según parece se graduara con honores como piloto de guerra, nada escuche sobre cocina
-bueno, es que muy en el fondo el sabe que debe aprender a hacer papilla para cuando la reina se quede sin dientes
-basta Dorian! –mi madre habla- creo que ya te burlaste suficiente, si no quieres ir solo dilo
-nada de eso madre, mañana por la mañana iremos…por que es por eso que estan aquí
-asi es Dorian –mi padre hace mas grave su tono de voz. Lo habia logrado, estaba furioso-
-perfecto, entonces si me permiten ire con mi novia al jardin, estan en su casa
Tomo a tn de la mano y la condusco hacia la salida de la casa. Pero no seria alli donde iriamos exactamente.
-la ayudo a subir a mi auto deportivo. Esta vez no queria chofer- vamos de compras
-¿de compras?
No le respondo hasta que estoy dentro y arranco el auto.
-asi es, tenemos que ir de etiqueta, ademas de comprarte un lindo tocado o sombrero
-no lo se, algo me dice que no iras en buen plan
-y quien si?, nadie que odie a la monarquia va a sonreirle a la reina
- eres un extremista y eso me da miedo…mas que tu verdadera profesion –me dice mirando fijamente el camino-
-vaya, mi verdadera profesion no te da miedo eh?
-No, simplemente eres un…un..-me mira- ¿Cómo lo defines?
-hombre de negocios
-rie- que gracioso, hombre de negocios ah?...entonces eso sera,… ¿y yo?
-tu seras… no lo se, como se le dice finamente a esto, mujer de la vida galante?, chica con la moral distraida?, amm…mariposa de la noche?
-ella me regala una sonrisa- dejemoslo en puta, creo que suena menos hipocrita
-prefiero decir que eres acompañante
-como quieras –se encoje de hombros-
-dime por que?
-me mira- ¿Por qué, que?
-la verdadera razon por la que quieres esto
-no lo se y prefiero seguir sin saberlo, solo quiero y punto
-tiene que haber una razon
-dime la tuya, por que eres lo que eres?
-por que lo soy y punto
No pretendo desenterrar mis fantasmas solo por que unos ojos bonitos, rostro encantador y una chica que da buenos acostones me lo pide. Aun no estoy tan imbesil como para perder la cabeza de ese modo.
-alli esta, nos parecemos demaciado
En eso tenia mucha razon, nos parecemos mas de lo debido. No caere en la cursileria de shekeaspeare diciendo que somos almas gemelas porque a estas alturas de la vida nadie que este en su sano jucio cree en esas patrañas. Pero reconocere que ambos hemos pasado cosas que nos hacen pensar del mismo modo y sentir la la misma manera. Y sanar las heridas con la misma medicina.
…
Caminamos hasta la tienda exclusiva de Carsten Schafer , un nuevo diseñador de modas aleman que se estaba abriendo paso en este mundo. Me llamo la atención un hermoso vestido y un tocado divino.
Pasamos y ambos elegimos lo adecuado para nosotros. Pero yo a diferencia de Dorian tenia exactamente en mente lo que queria. El se la paso probandose trajes hasta que se decidio.
Mientras lo miraba verse al espejo me preguntaba como es que habia terminado en esto. No parece de los que hace ese tipo de cosas. No es vulgar y nunca ha faltado el respeto a nadie. Nisiquiera a su padre que bien se lo puede merecer.
Creo mas bien que es un niño asustado atrapado en un cuerpo de un hombre de 25 , jugando al gangster. Sea como sea el me ayuda y me ayudaria.
-¿Y? -me mira a tarves del espejo.-
-si, me gusta
-de acuerdo, entonces me lo llevare
Entra al probador a cambiarse. Yo comenzo me pongo de pie y caminoa hacia la seccion de catalogos. Tomo uno y lo hojeo. Estaba lleno de smokings para bodas.
-¿Cómo alguien tan hermoso es tan idiota para casarse? –pregunto mentalmente al ver a un guapo modelo-
Segui hojeando hasta que reconoci su voz. Voltee discretamente a todos lados para confirmar que quiza alucinaba. Pero no era asi.
A unos metros de distancia estaba el. Con su cabello largo, una sudadera gris, jeans negros y lentes de sol.
No sabia donde esconderme. Lo primero que vi fue el catalogo y juro que queria caber entera y meterme alli.
-mierda,mierda, mierda! –susurro mientras pienso que hacer- piensa tn!...x el amor de dios!
Quiza no deba meter a dios en esto. Sobre todo porque ya nisquiera pienso en el.
Algo alumbra mi cabeza. Una especie de bombilla se ilumina y la idea llega a mi, justo antes de que georg comienze a caminar en mi direccion. Di la vuelta y hago lo que hago sin pensar.
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